AniCura advierte de que la resistencia a los antimicrobianos también afecta al sector de la atención veterinaria
Los antimicrobianos pueden salvar vidas, pero solo si siguen siendo eficaces. Con el fin de concienciar y fomentar la acción para hacer frente a la aparición y propagación de bacterias resistentes a los medicamentos en el sector veterinario, AniCura, uno de los principales proveedores europeos de atención veterinaria de alta calidad para mascotas, se suma a la Semana Mundial de Concienciación sobre el Uso de los Antimicrobianos, del 18 al 24 de noviembre.
Estos medicamentos son actualmente una forma eficaz de tratar infecciones y detener la propagación de enfermedades o incluso la muerte causada por bacterias, virus, hongos o parásitos. Sin embargo, las bacterias resistentes a los antibióticos se han consolidado como una de las mayores amenazas para la humanidad, y es posible que esta resistencia se propague entre los animales, los seres humanos y el medio ambiente.
“En AniCura tenemos una gran responsabilidad, ya que tratamos a más de 4,5 millones de pacientes al año. A medida que sigamos creciendo en número de clínicas, continuaremos poniendo énfasis y centrándonos en garantizar un uso más prudente de los antimicrobianos; seguiremos midiendo nuestros progresos a través de nuestros estudios anuales”, afirma José Gómez, head of Medical Service Iberia de AniCura.
Por un uso más prudente de los medicamentos
AniCura se esfuerza a diario por garantizar un uso más prudente de los antimicrobianos en los 15 países europeos en los que está presente. Una de sus principales prioridades es limitar la resistencia a los antibióticos garantizando un uso más racional, únicamente cuando esté justificado y sea necesario.
En 2018, el grupo estableció un ambicioso objetivo para el uso responsable de antibióticos en perros: que solo el 5% de los pacientes recibieran antibióticos sistémicos para 2030. Con 4,5 millones de consultas veterinarias al año, estas acciones pueden tener un gran impacto.
“Aunque hemos visto progresos desde el primer estudio anual de 2016, se necesitan más esfuerzos para alcanzar el objetivo fijado para 2030. Se debe hacer hincapié en la concienciación y el cumplimiento de nuestras directrices sobre antibióticos para garantizar que, cada vez que se prescriban antibióticos, su uso esté justificado y sea necesario”, explica José Gómez.
Una garantía de prevención y control de las infecciones
Con el fin de acelerar aún más sus esfuerzos, AniCura ha trabajado en unas directrices que abordan las indicaciones más comunes del uso de antibióticos sistémicos. Estas pautas incluyen, por ejemplo, la profilaxis antibiótica quirúrgica, las infecciones de heridas y abscesos, los trastornos gastrointestinales, las infecciones cutáneas, las infecciones del tracto urinario, los procedimientos dentales y las enfermedades de las vías respiratorias inferiores y superiores.
Para alcanzar los objetivos fijados, se está en permanente actualización de las guías y procedimientos del uso racional de antibióticos acorde con las últimas evidencias científicas, siendo este uno de los estándares fundamentales del programa QualiCura, un proyecto que busca mantener la excelencia de los servicios que se prestan en el grupo.
“Las evaluaciones periódicas, realizadas mediante encuestas a nuestros asociados, aportan una enorme cantidad de datos que nos permiten estar a la vanguardia en este campo”, comenta José Gómez. “Así mismo -añade- el uso de geles cromóforos u otras técnicas como la presión negativa para el manejo de heridas es habitual en nuestros centros, en los que contamos con grandes especialistas referentes en este campo”.
El cuidado de los animales va mucho más allá de la visita de un paciente, por eso la formación y actualización continuada de los antimicrobianos es otro de los pilares básicos de la actividad de AniCura.
