Caso de éxito

Röhrenhandel Appenzell AG ha ampliado su capacidad de almacenamiento con nuevas estanterías cantiléver y de paletización de Ohra, para poder ofrecer una cartera aún mayor de materiales de construcción. Durante la ejecución del almacén se tuvieron en cuenta determinados requisitos estructurales: Los bastidores de las estanterías de paletización instaladas en el interior se dividieron para que pudieran ser llevados al sótano mediante un montacargas. Las estanterías instaladas en el exterior están diseñadas para cargas de nieve y viento elevadas. Además, las estanterías instaladas en los límites de la propiedad están provistas de una fachada de madera autóctona para que se integren estéticamente en el plan de vecindad de Appenzell.

La cartera de productos de Röhrenhandel Appenzell abarca artículos de ingeniería civil, así como edificación, horticultura y productos de hormigón en general. Asimismo, los constructores podrán encontrarán una amplia gama de herramientas y ropa de trabajo. Para el almacenamiento de los diferentes artículos, la empresa decidió instalar una combinación de estanterías cantiléver y de paletización de Ohra, parte de las cuales se encuentran en una nave y parte en el exterior. El nuevo almacén ofrece espacio para aproximadamente 1.000 europaletas y se opera mediante transpaletas y carretillas elevadoras. Röhrenhandel Appenzell ya ha utilizado estanterías Ohra en almacenes anteriores y está convencido de la robustez de las estanterías construidas con perfiles de acero macizo laminado en caliente de calidad. Otro factor importante a la hora de tomar la decisión, fue la posibilidad de adaptar las estanterías a las necesidades de la empresa: Por ello, los bastidores de las estanterías de paletización instaladas en la nave tuvieron que dividirse, ya que el lugar de instalación en el sótano solo es accesible mediante un montacargas. A continuación, las partes se unieron para que pudieran volver a separarse sin que se dañaran, por ejemplo, en el caso de un traslado.

Las estanterías cantiléver y de paletas instaladas en el exterior tienen una cubierta para proteger el material almacenado; Ohra equipó los soportes con los brazos de techo correspondientes, el techado fue realizado por una empresa de construcción local. Ohra diseñó la estática de la estantería para cargas de nieve elevadas de hasta 484 kilogramos por metro cuadrado y cargas de viento de hasta 110 kilogramos por metro cuadrado previstas en Appenzell.

Al mismo tiempo, las estanterías exteriores debían cumplir con las normas de protección del patrimonio vigentes en Appenzell: estas requerían un techado que no fuera brillante, un drenaje de la cubierta con retención —en esto, el agua de lluvia es retenida en la cubierta y controlada mediante drenajes especiales—, así como un revestimiento de las estanterías de calle con maderas autóctonas sin tratar. Las nuevas estanterías se integran así de forma armoniosa en su entorno como cuerpos modulares.