Proyecto real de vivienda pasiva

La edificación sostenible fue uno de los pilares de la última edición de Construmat, manteniendo la tónica de los últimos años. Una de las firmas destacadas fue Arquima, compañía especializada en construcción pasiva industrializada y que estuvo en el evento barcelonés apostando decididamente por la sostenibilidad y la innovación en el sector.

Proyecto real de vivienda pasiva de Arquima.

Construmat alcanzó en esta edición los 422 expositores, recibiendo más de 54.000 visitas profesionales. Buena parte de los asistentes pasaron en algún momento por el stand de Arquima, interesándose principalmente por la vivienda pasiva instalada en el espacio Sustainable Solutions. La construcción, que será certificada por el Passivhaus Institute, ha sido uno de las principales atracciones de la feria, con multitud de personas conociendo de primera mano las características y beneficios de una vivienda pasiva.

Este proyecto residencial ha permitido apreciar las diferentes fases y capas constructivas: desde la estructura a la casa ya terminada. Una vivienda de 70 metros cuadrados formada por un salón-comedor-cocina, un baño y un dormitorio, con un interesante porche a la entrada.

Un proyecto real que ahora será reubicado en un idílico paraje del Parque Natural del Lago de Sanabria (Zamora), a una altitud de 1.200 metros sobre el nivel del mar. Las gélidas temperaturas en invierno de la zona no serán un problema gracias a las grandes ventajas de la construcción Passivhaus, dado que la casa funciona simplemente con una chimenea de leña que separa el comedor del dormitorio, y una batería de aguas: un tándem clásico en un elevado porcentaje de las viviendas de Arquima.

La muestra ha permitido que los visitantes hayan apreciado detalles del método constructivo de Arquima como carpinterías con cristal triple, espesores de aislamiento, estanqueidad, impermeabilización, cada una de las diferentes capas que forman cada sección de muros, tabiques, forjados o cubiertas, además de los sistemas tanto de ventilación mecánica controlada con recuperación de calor como de aerotermia.

El principal material, la madera, es otra de las apuestas habituales de Arquima. La madera es un material atractivo para el diseño pasivo debido a la forma en que combina la masa térmica con una serie de méritos de rendimiento, incluida la resistencia al agua, la integridad estructural y la calidad del acabado.

Además, la madera tiene propiedades acústicas y térmicas inherentes que aumentan sus capacidades estructurales. Como resultado, el uso de la madera en un proyecto puede ayudar a mantener la calidad ambiental interior deseada donde se valora el ruido y el confort térmico.

Por todo ello, tanto en la vivienda presentada en Construmat como en otros muchos proyectos, Arquima apuesta por este material, consciente de su aportación sostenible junto al elevado componente estético que siempre ofrece. Por si fuera poco, el tipo de madera utilizado procede de bosques gestionados de manera sostenible y certificados con los sellos PEFC y FSC®.

En definitiva, la presencia de Arquima en Construmat fue una excelente confirmación a la labor emprendida por la firma desde sus inicios, con la gran acogida del público asistente como el principal refuerzo obtenido por la empresa.