Salta Pirata cumple 50 años: medio siglo saltando entre generaciones y jugando en familia
Pocos juguetes logran mantenerse vigentes durante cinco décadas. Menos aún lo consiguen con la energía intacta, saltando de generación en generación sin perder la magia. 'Salta Pirata', uno de los grandes clásicos del juego familiar, celebra en 2025 su 50 aniversario.
Medio siglo de risas, gritos de sorpresa y espadas que se clavan esperando —o temiendo— el gran salto del pirata. Un hito que Bizak, la juguetera con más de 75 años de historia, conmemora con orgullo, alegría y una edición especial que conecta pasado y presente con un solo gesto: ¡saltar!
Más de 75 años creando momentos para jugar y recordar
En un sector tan dinámico como el del juguete, pocas marcas pueden presumir de una trayectoria tan sólida como Bizak. Fundada en 1946, la compañía ha evolucionado a través de las diferentes fases de la distribución del juguete, hasta consolidarse como uno de los grandes referentes del sector infantil en España……. y apoyada por ese conocido jingle tarareado por todos “Bi, Bi, Bi BIZAK”. Desde sus inicios, ha apostado por productos que combinan pedagogía, calidad, innovación y, sobre todo, diversión.
Hoy, tras más de siete décadas de dedicación, Bizak sigue creando experiencias de juego memorables para millones de familias. Para la compañía, cada juguete es mucho más que un producto: “es una oportunidad para conectar a la familia, educar desde el juego y generar momentos compartidos que quedan en la memoria”.
Por eso, el aniversario de 'Salta Pirata' es más que una fecha señalada: es la celebración de un modo de entender el juego que ha resistido el paso del tiempo.
“Salta Pirata”: historia de un fenómeno global
El juego nació en Japón en 1975, comercializado por la compañía Tomy (hoy Takara Tomy), gracias al talento creativo de los ingenieros Toru Nishimiya y Toshiaki Kurita. Su propósito era claro: cultivar la imaginación y provocar la risa de millones de niños y niñas en todo el mundo.
Desde entonces, 'Salta Pirata' ha vendido más de 20 millones de unidades en 47 países, demostrando una longevidad excepcional en un mercado en constante cambio. Su éxito radica en una mecánica tan simple como brillante: insertar espadas en una barrica sin saber cuándo saltará el pirata. Esa mezcla de tensión, sorpresa y carcajada lo convirtió en un clásico inmediato. Sin necesidad de instrucciones complejas, ni palabras, es un juego universal que trasciende edades y culturas.
Un clásico que no pasa de moda
En la era de las pantallas, los videojuegos y el entretenimiento conectado, ¿cómo se explica el éxito de un juego como 'Salta Pirata'? Tal vez en su capacidad para enganchar desde el primer segundo, su dinamismo físico, su componente de azar… y, sobre todo, en su magia para reunir a toda la familia alrededor de una mesa. Padres, madres, abuelos, nietos: todos pueden jugar y reír juntos.
Consciente de su legado, pero también de su futuro, Bizak ha impulsado versiones especiales del juego con licencias actuales como Súper Mario, Bluey o Stitch. Así, 'Salta Pirata' continúa renovándose sin perder su esencia. Y en 2026, llegarán tres nuevas versiones con personajes aún más actuales, pensadas para seguir conectando con los más pequeños.
Porque cuando un juego conecta con tantas familias, su historia no se detiene: crece, se reinventa y sigue enamorando a quienes lo descubren por primera vez… o por quinta.
Medio siglo saltando, y lo que queda
“Celebrar 50 años de ‘Salta Pirata’ es celebrar las cualidades del juego a través del juguete. Hay juguetes que se convierten en iconos no solo por lo que hacen, sino por lo que generan: unión, alegría, complicidad”, afirma Jaime Guerra López, presidente ejecutivo de Bizak. “Este aniversario celebra el poder del juguete en sus aspectos más importantes: desde lo pedagógico y lo didáctico, hasta la magia, la emoción y la diversión que supone para cualquier niña o niño. Porque un juguete tiene la capacidad de reunir a toda la familia en torno a él”.
Este aniversario no es ningún final. Es un impulso para seguir saltando. Porque mientras haya una espada, un barril y una risa por compartir, nuestro pirata seguirá saltando.
¡Feliz cumpleaños, Salta Pirata!

































