El EREN inscribe en el registro oficial dos instalaciones de autoconsumo eléctrico y avala su compromiso con este modelo energético alternativo
El equipo de cogeneración con combustible gas natural aporta al inmueble simultáneamente energía eléctrica –en concreto, 5,5 kilovatios (kW)– y energía térmica útil en forma de calefacción y agua caliente sanitaria –12,5 kW–, mientras la instalación solar fotovoltaica tiene una potencia de 4,18 kilovatios pico (kWp).
Ambas tecnologías han sido ejecutadas en el marco del Real Decreto 1699/2011, de 18 de noviembre, por el que se regula la conexión a red de instalaciones de producción de energía eléctrica de pequeña potencia, y posteriormente se han adaptado a los requisitos exigidos en el Real Decreto 900/2015, de 9 de octubre, por el que se regulan las condiciones administrativas, técnicas y económicas de las modalidades de suministro de energía eléctrica con autoconsumo y de producción con autoconsumo. Esta última normativa obliga a instalar un contador para medir la energía eléctrica neta generada.
La apuesta del EREN por el autoconsumo está en consonancia con los retos que plantea la Estrategia Europa 2020 en el ámbito del clima y la energía en orden a impulsar el crecimiento y el empleo: aumentar la eficiencia energética el 20 % respecto al año 1990, reducir el 20 % las emisiones de CO2 en el mismo horizonte temporal y generar al menos el 20 % de la energía eléctrica a través de fuentes renovables.
Los sistemas de autoconsumo presentan múltiples ventajas, como son su viabilidad técnica para la producción de energía eléctrica para consumo propio, logrando una rebaja de costes; su fácil integración en las edificaciones de cualquier uso y su sostenibilidad y eficiencia medioambiental, ya que al basarse en gran medida en el aprovechamiento de fuentes renovables comportan una reducción de emisiones.
Ahorro anual de 2.300 euros en compra de electricidad y reducción de emisiones
En el caso de las instalaciones que funcionan en el EREN, las previsiones indican que con la producción anual estimada –12.000 kWh al año la de microcogeneración y 6.500 la fotovoltaica– el ente público ahorrará 2.300 euros al año en la compra de electricidad a la red, impuestos incluidos, y reducirá 750 kilogramos en emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera en el mismo periodo.
El Ente Regional de la Energía refuerza así su condición de laboratorio de pruebas en materia energética, en la medida en que la sede de este organismo alberga sistemas variados de producción y suministro, tanto de energía térmica como eléctrica, ya estén basados en fuentes renovables, en el ahorro energético o en la cogeneración. Además, el edificio recibe periódicamente a escolares, universitarios y asociaciones profesionales, que lo visitan como ejemplo de buenas prácticas impulsadas por la iniciativa pública.
Trasladar estos hábitos al ámbito privado, tanto a las empresas como a la economía doméstica, es otra de las áreas en las que trabaja el EREN, que recientemente ha diseñado una plataforma digital específica sobre autoconsumo –en colaboración con otras entidades que forman parte de la Asociación de Agencias Españolas de Gestión de la Energía (EnerAgen)– para acercar a los ciudadanos a este nuevo modelo energético. El portal www.autoconsumoaldetalle.es ofrece información sobre los aspectos legales, técnicos y económicos asociados a las tecnologías vinculadas a este sistema, además de permitir a los usuarios calcular sus prestaciones y medir su rentabilidad en función de la inversión acometida y los ahorros conseguidos en la factura.
