AkzoNobel: producción ecológica para recubrimientos en polvo

La planta de AkzoNobel en Como (Italia) es la mayor de la compañía en Europa para la producción de recubrimientos en polvo, y gracias a una inversión de 20 millones de euros estará preparada para albergar una gran expansión de la capacidad para la producción de recubrimientos para automóviles.

Las nuevas instalaciones proporcionarán un apoyo estratégico a la planta que la compañía tiene en Arnsberg (Alemania), donde también se está añadiendo una nueva línea ayudando a asegurar el suministro a los clientes. La capacidad productiva extra en Como se está instalando en un edificio renovado donde se hicieron originalmente los recubrimientos en polvo, lo que supone una reutilización sostenible de una parte histórica de estas instalaciones fabriles. Además de introducir equipo y tecnología avanzados para lograr mayores tasas de productividad y aumentos de la eficiencia, la nueva inversión en Como también utilizará energía reciclada para reducir el consumo.

Esta ampliación de capacidad productiva en Europa es la continuación de las recientes inversiones en China y Vietnam destinadas a crear instalaciones y métodos de producción más ecológicos, que a su vez ayudarán a AkzoNobel a alcanzar sus ambiciones de sostenibilidad.

Ampliar la capacidad productiva en Europa

Daniela Vlad, directora de Negocios de AkzoNobel Powder Coatings, explica que “estamos implementando un plan de expansión estructurado para aumentar la capacidad en nuestras instalaciones de Como y en las de Arnsberg”. Una operación que “ayudará a fortalecer nuestra posición en el mercado y nos proporcionará un respaldo en caso de que tengamos problemas de suministro”.

El nuevo edificio de última generación en Como y la línea adicional en Arnsberg ayudarán a la compañía a continuar creciendo con sus clientes, particularmente en el segmento de la automoción. Y, como en cualquier edificio nuevo, el enfoque es cumplir con los más altos estándares de producción sostenible. “Aunque los recubrimientos en polvo ya son inherentemente sostenibles, también nos comprometemos a hacer que nuestros propios edificios e instalaciones sean lo más sostenibles posible”, afirma Vlad.