Anna Heringer diseña el informe anual del Grupo Zumtobel
“Aunque generalmente se me conoce como arquitecta, ante todo soy activista”, afirma Anna Heringer, para quien la arquitectura es una herramienta para mejorar la vida. Saltó a la fama internacional en 2006 con la construcción de la escuela METI en Rudrapur (Bangladesh), que diseñó como proyecto de fin de carrera en la Universidad de Arte y Diseño de Linz. Desde entonces, Heringer ha seguido desarrollando y difundiendo su galardonado enfoque arquitectónico a través de edificios en Asia, África y Europa, así como impartiendo clases de arquitectura en la Universidad de Liechtenstein, la Universidad de Harvard y la ETH de Zúrich, entre otros.
Para Grupo Zumtobel, la arquitecta alemana ha diseñado el informe anual de este año, que se presentará en octubre en el marco de una exposición en el Light Forum de la empresa en Dornbirn.
Su principal interés es utilizar la arquitectura como catalizador del desarrollo local, en particular mediante el uso de materiales de construcción naturales como la tierra, el bambú y la madera, y la participación de los usuarios en el proceso de construcción. La visión y la motivación que subyacen a su trabajo es explorar y utilizar la arquitectura como medio para reforzar la confianza cultural e individual. Para Heringer, vivir con alegría es un proceso creativo y activo, y le interesa profundamente el desarrollo sostenible de nuestra sociedad y nuestro entorno construido.











