Stefano Boeri Interiors y Targetti desarrollan el sistema de iluminación exterior con sensores ambientales Ivy
De la colaboración entre Stefano Boeri Interiors y Targetti nace Ivy, el primer sistema de iluminación exterior, que integra luz, audio y sensores ambientales, promoviendo el bienestar y el respeto por el medio ambiente, con el fin de optimizar la integración con la arquitectura y garantizar la máxima comodidad para los usuarios. Para ello, restablece la armonía entre la arquitectura, la iluminación y el entorno, para adaptarse a las nuevas necesidades.
El proyecto nació de la idea de crear un sistema capaz de fomentar las actividades al aire libre y reproducir el confort del interior también en el exterior. Ivy es un sistema orgánico con múltiples configuraciones. De este modo, aplicado de forma innovadora al entorno exterior puede instalarse en terrazas, en las zonas de asientos exteriores de actividades comerciales y en espacios públicos, así como en edificios existentes o nuevas construcciones.
Es una ‘pista’ tecnológica que contiene todas las herramientas necesarias para vivir, trabajar, socializar y relajarse al aire libre. Además, el sistema permite conectar accesorios y aparatos útiles en la vida diaria, así como la interacción directa e indirecta con el usuario: desde la sincronización con su smartphone para control y gestión de la iluminación hasta la reproducción de música con altavoces específicos. Una completa gama de elementos, desde las luminarias hasta la difusión del sonido o los sensores, crea las condiciones óptimas para disfrutar de los espacios exteriores.
Para la alimentación eléctrica, cada elemento está alojado de forma segura en un perfil de aluminio, que puede instalarse en el techo o la pared, tanto en superficie como empotrado. Las luminarias lineales, los proyectores y las luminarias colgantes permiten diseñar una iluminación paisajística dinámica, funcional y sorprendente.
Está disponible en tres acabados estándar -gris ferrita, negro anodizado y blanco anodizado- a los que se añaden todos los colores especiales RAL. Gracias a esta flexibilidad, el usuario puede construir un sistema con una composición personalizada, así como las luminarias, para crear diferentes escenarios.
Los sensores se convierten en un valor añadido del sistema como detector de presencia para la gestión y optimización, pero también como sensor de control de la calidad del aire del entorno. Y por si esto fuera poco, todo el sistema es controlable y adaptable con el smartphone.
