Ascensores y Montacargas 87

actualidad ASCENSORES Y MONTACARGAS RECORDATORIO A LUIS ARCADIO GONZÁLEZ IGLESIAS Manuel Carlos Maqueda García, presidente y fundador de Fepyma Andalucía y actualmente director de desarrollo corporativo de Dúplex Elevación España, recuerda a Luis Arcadio González Iglesias, recientemente fallecido. Conocí a mi siempre amigo Arcadio en abril de 1985, siendo un servidor empleado de Ascensores, S.A. (ASA) y él delegado de Boetticher Elevadores, S.A. en Cádiz. Le encomendaron la difícil tarea de fusionar estas dos empresas en Sevilla y derivarlas el nombre de Thyssen Boetticher, S.A., lo cual se culminó en octubre de 1985 y Arcadio pasó a ser delegado de Sevilla. Fue una época bastante mala, pues el ambiente que existía en aquel tiempo era hostil en la plantilla de Sevilla. De cualquier manera, de todo se aprende y es una experiencia que se conserva. En aquel entonces yo tenia 23 años y Arcadio, 33. Nos unieron bastante los grandes problemas que había en la delegación de Sevilla, hasta que pasados unos pocos años, en el verano de 1987, nos presentaron al nuevo delegado de que venia de Thyssen Boetticher Madrid, Juan José Jaén, y a nuestro amigo le dieron un billete de vuelta a Cádiz. Arcadio era un hombre educado y un gran maestro. Un ingeniero nacido en la cuenca minera de Mieres (Asturias), gran luchador, criado en la Universidad Laboral de Asturias, donde él decía de sus compañeros de estudios que eran su otra familia. Profesionalmente pasó por Madrid, siempre en la misma empresa, y dio el salto a delegado en la ciudad de Murcia para continuar en su segunda tierra, Cádiz. Las situaciones ocurren y hay que enfrentarse a ellas. En mayo de 1988, Arcadio creó su empresa (Ascensores Lagi SL) y ese mismo año, curiosamente, yo monté la mía, Ascensores Itálica. Colaboramos mucho, se luchó contra viento y marea y no fue hasta pasados unos años que nos colocamos en una muy buena posición en el sector. Quiero opinar que las cosas no salen por casualidad y la suerte hay que buscarla. Arcadio y su equipo trabajaron muchísimo para poder posicionarse y crear un nombre importante en el sur de España. Siempre me tuvo a su lado y nuestros más comunes amigos y sus dos hijos, Marcos y Javier, lo saben sobradamente. Costó trabajo que entrara en la Asociación Empresarial de Ascensoristas de Andalucía Pyme, pero cuando llegó el momento lo hizo de pleno tomando el mando de Fepyma España, relevando a otro gran histórico, Rafael Torres de Ascensores Torres, en Valencia. Cumplió su mandato y su salida es como lo hacen los grandes toreros en la Maestranza de Sevilla: por la Puerta del Príncipe, «maestro entre maestros». La vida va cambiando al igual que las personas. Se me llena la cabeza de recuerdos que son sentimientos a una persona que nos deja un hueco y un señorío. No quiero dejar pasar esta oportunidad de recordar esas tardes a deshoras en la oficina de Thyssen Boetticher, cuando llamaba a su casa para hablar con entonces su único hijo Marcos, para decirle que recogía y volvía a casa. 120 kilómetros de ida y otros tantos de vuelta. Y así todos los días. Entonces te dabas cuenta que por encima de todo era una gran persona y muy humana. Gracias, Arcadio, por haberme elegido como alumno y, sobre todo, amigo, siempre tan meticuloso, acompañado de un lápiz y goma de borrar, haciendo numeritos, imputaciones de horas… Yo te decía «déjate Arcadio, que aquí lo que tenemos es que coger ascensores». Risas, bromas y por supuesto profesionalidad. Donde quiera que estés, no te preocupes de tu gran familia. Estuviste bien rodeado, protegiste a todos y todos lo saben. Te tengo una gran estima por las grandes dificultades que encostraste en la vida desde muy niño. Un solo ejemplo: me comentaste que aprendiste a atarte los cordones de los zapatos en un orfanato, con eso queda dicho todo. No hay derecho a que se vayan personas buenas tan jóvenes, aunque su legado es infinito. Hoy descansas en Asturias, tu verdadera tierra, pero no te olvides que tu familia se queda en Cádiz. Las dos ciudades rodeadas de mares y testigo de una continuidad que empezaste y que consolidarán tus mejores aliados, tus hijos Marcos y Javier. Un gran abrazo y hasta siempre, amigo. 9 54 - Ascensores y Montacargas

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx