para ofertar o incluir en sus servicios de mantenimiento la opción de entrega de una línea móvil para los sistemas de comunicación, lo que permite reducir el coste del alquiler de línea en las comunidades de propietarios. Para ello, se basan en equipos telefónicos capaces con una sola línea de gestionar la comunicación de hasta 8 cabinas, con el consiguiente ahorro para el cliente final. En este sentido, las empresas mantenedoras agradecen especialmente la facilidad de montaje, uso y programación de los equipos, con, por ejemplo, la posibilidad de programar hasta 6 números de teléfono y a distancia, que hace más sencillo el montaje y la puesta en marcha. Las empresas se posicionan en el mercado de acuerdo con los sistemas y prestaciones que son capaces de ofrecer. Y, en este sentido, como constata un proveedor, «estamos asistiendo a una verdadera y clara segmentación de mercado en función de qué empresas están incorporando o no los equipamientos de emergencia y comunicación más avanzados». En el sector se concede gran importancia a las nuevas normativas EN 81-20 y EN 81-50 que sustituyen a las vigentes EN 81-1 y EN 81-2. Se considera que representan el cambio más importante en el diseño de ascensores ocurrido en los últimos 20 o 25 años, afectando a elementos tales como el diseño de la cabina, el pozo, diseños de maquinaria y especialmente a la instalación eléctrica y controles, llamada a convertirse en el estándar mundial a seguir para la industria del ascensor y convirtiendo a la industria europea en referente mundial. Además al desaparecer en ellas la segmentación por partes de ascensores eléctricos e hidráulicos y unificarse en ascensores, como «diseño e instalación de ascensores», permiten definir y describir mucho mejor todo lo referente a inspecciones, pruebas, cálculos y tipos de ensayos de componentes. Al mismo tiempo, separan la parte relacionada con lo que podría llamarse reglas de ejecución, en la EN 81-20, de la parte de pruebas y cálculo de componentes de ascensores, la EN 81-50. El sector, no obstante, considera también que «las nuevas normativas surgen por motivos más administrativos que técnicos». Por ejemplo, ya se había procedido a la 3ª enmienda de la normativa EN 81, la A3, siendo este el número máximo de revisiones que puede tener una normativa. Por tanto, para futuros cambios hay que adoptar una nueva norma. Además, había que unificar el elevado número de interpretaciones, que condicionan la norma, pero sin tener la misma fuerza legal. El sector avanza claramente hacia sistemas cada vez más completos y compactos, capaces de integrar GSM de datos y de cumplir integralmente las normativas, en especial las de accesibilidad. Pensando también en el instalador, se prevén mejoras en estos equipos, tanto a nivel de software como de hardware, buscando el tamaño más reducido, así como la facilidad de manejo y montaje. Se han barajado opciones como videollamada o grabación de video y audio, aunque debido a los problemas de privacidad, han avanzado poco. En general, se va a evolucionar hacia sistemas de control inteligentes, que permitirán la completa monitorización de los sistemas en 26 - Ascensores y Montacargas
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