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mpresas e A nadie se le escapa la importancia que tienen los cables de acero como elementos de tracción o de sustentación de la cabina. Desde un punto de vista estrictamente operativo, la elección de los cables la realiza el fabricante del ascensor. Es quien estudia, diseña y certifica una máquina acorde con los requisitos normativos a los que se va a someter. Pero no es menos importante el análisis periódico que, posteriormente, tendrá que realizar el mantenedor y el organismo de control, que serán los que asumirán la responsabilidad de decidir si el estado de los cables permite su continuidad en la instalación o si, por el contrario, se han de retirar. En cuanto a los criterios de rechazo, ambas partes deberán remitirse a lo indicado en el manual de uso y mantenimiento de los cables de acero. En su defecto, existen normativas internacionales de las que extraer información para decidir si los cables se pueden mantener o no. Desde el punto de vista de las responsabilidades, se dividen entre el administrador y los propietarios (quienes tienen la obligación de encomendar el mantenimiento a una empresa autorizada) y la empresa que realiza el mantenimiento, la cual debe realizar los trabajos de acuerdo con la ley y las normas de referencia. Si el técnico de mantenimiento reconoce la necesidad de reemplazar los cables, debe informar de inmediato al administrador de que se debe realizar el trabajo de reemplazo. Elementos vitales del ascensor Los cables de tracción de un ascensor son una de las partes más importantes de esta máquina, ya que es gracias a ellos que el ascensor no solo puede moverse, sino también permanecer suspendido. Por lo tanto, los cables realizan dos tareas particulares: Y tú… ¿Cómo inspeccionas los cables de elevación del ascensor? La tecnología magneto inductiva de Cables y Eslingas SLU garantiza una inspección rápida, fiable, objetiva y, sobre todo, segura, como nos explican desde la firma en este artículo la primera es garantizar la funcionalidad de la máquina; y la segunda, decididamente más importante, está relacionada con la seguridad de los pasajeros. Un cable metálico es un objeto extremadamente complejo, que consiste en una serie de alambres metálicos debidamente enrollados entre sí con geometrías a veces muy complicadas. Partiendo de la consideración de que un cable es un elemento consumible, es erróneo considerarlo como una parte estructural del sistema (una viga o una placa), ya que, durante su funcionamiento normal, se desgastará, reduciendo gradualmente sus características de resistencia a la tracción. Es por ello por lo que el estado del cable debe ser vigilado periódicamente y con minuciosidad. Al contrario de lo que se pueda imaginar, los cables de un ascensor nunca se rompen por sobrecarga –también gracias a los numerosos sistemas de seguridad presentes en la cadena de control del ascensor–, pero están sujetos a importantes fenómenos de fatiga, que contribuyen a crear grietas localizadas en los alambres y aleatoriamente distribuidas. Estas roturas, extremadamente difíciles de identificar, constituyen auténticas faltas de sección, que debilitan progresivamente el cable, disminuyendo su carga de rotura. Cuando aumenta el número de hilos rotos y la carga se distribuye sobre los restantes hilos intactos, estos últimos se someten a una tensión superior a la normal y entran en régimen de deformación plástica, llegando a romperse. 36 - Ascensores y Montacargas

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