Tratamientos térmicos y de superficies

12 TECNOLOGÍA ADITIVA EHLA 3D permite varias ventajas únicas relacionadas con el proceso a la vez: altas velocidades de construcción, gran flexibilidad y diversidad de materiales, y alta precisión al mismo tiempo. “En un futuro próximo, la tecnología debería permitirnos producir incluso estructuras complejas de filigrana de forma fácil y rentable a gran escala”, afirma Schaible. “También son concebibles los componentes individualizados”. PRIMEROS PROYECTOS INICIADOS El primer prototipo del sistema ya se utiliza con éxito. Se realizó en 2019 en colaboración con Ponticon GmbH de Wiesbaden (Alemania). Su concepto se basa en el principio cinemático del trípode, una construcción con tres motores lineales que se conectan mediante barras de acoplamiento a la plataforma de construcción sobre la que se desplaza el componente a procesar. “Funciona de forma similar al tren de levitación magnética Transrapid”, explica Schaible. La estructura especial compensa en gran medida las fuerzas de inercia. En nuestro caso, esto permite a la plataforma de construcción realizar movimientos muy rápidos y precisos sin provocar grandes vibraciones". De este modo, a día de hoy, el sistema puede procesar componentes de hasta 25 kilogramos de peso, con hasta cinco veces la aceleración debida a la gravedad y velocidades de hasta 200 metros por minuto, al tiempo que alcanza una precisión muy alta de 100 micrómetros. Con la deposición convencional de material por láser, lo normal es que sólo se alcancen de 0,5 a 2 metros por minuto. “Para poner las ventajas de EHLA 3D a disposición de un amplio grupo de usuarios en el entorno industrial, Fraunhofer ILT está llevando a cabo actualmente un trabajo de investigación específico”, afirma Schaible. “Por el camino, tenemos que encontrar formas de gestionar la complejidad”. Para ello son fundamentales, por ejemplo, los conceptos de monitorización de procesos y las herramientas de planificación automatizada de trayectorias, pero la variación de los parámetros sigue siendo, por el momento, la más importante en el laboratorio. Durante el desarrollo del proceso, todos los parámetros deben coordinarse con precisión: la velocidad, la potencia del láser y la cantidad de polvo en función de la combinación de materiales que se procese en cada caso. “Todavía queda mucho trabajo preliminar experimental y empírico por hacer. Sin embargo, los primeros interesados de la industria ya han tanteado el terreno”, afirma Schaible con optimismo. “Así que sabemos que vamos por el buen camino”. Actualmente, en un proyecto del consorcio industrial ICTM International Center for Turbomachinery Manufacturing, numerosas empresas de renombre de los sectores aeroespacial y de turbomaquinaria están perfeccionando el EHLA 3D; se ha solicitado un proyecto de seguimiento para 2022. También se están planificando otros proyectos de consorcio bilaterales y con financiación pública, así como estudios de viabilidad. El abanico de posibilidades para la producción y el procesamiento de componentes se ampliará muchas veces con EHLA 3D, al tiempo que el proceso se vuelve más eficiente y compatible con el medio ambiente. n La cinemática del trípode en acción: boquilla de alimentación de polvo estacionaria y plataforma de construcción móvil para la ejecución de movimientos de alimentación rápidos y precisos. Foto: Fraunhofer ILT, Aachen, Germany.

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