TradeSport 182 - Noviembre 2010

las marcas de outdoor y running no es exactamente el mismo ni prioriza las mismas cualidades. O dicho de otra manera: aunque hay una zona donde las propiedades del calzado –y, por lo tanto, su uso-, convergen, dentro del trail-running hay dos niveles de práctica –en función de la dureza del terreno- y dos tipos de consumidores: los que vienen del outdoor –la mayoría- y los que vienen del running. Y ello lo marca de manera determinante la marca por la que apostarán y el perfil del comercio en el que comprarán. A diferencia de otras categorías del mundo outdoor, su crecimiento no responde a un factor moda, sino que ha sido la tecnología y el desarrollo lo que ha dinamizado el segmento. Eso, y la idea cada vez más extendida de que es una modalidad que aporta muchos beneficios físicos y psíquicos. Para unos es una manera perfecta de entrenar resistencia, para otros es una muy buena alternativa para estar en contacto con la naturaleza, y para muchos, es una manera de correr mucho más divertida que hacerlo en ciudad. En cuanto al nivel de exigencia física, no es un deporte que requiera una gran preparación –aunque es aconsejable tener un mínimo de “fondo”- de manera que se trata, seguramente, de una opción ideal para quienes, pese al ritmo actual de vida, no quieren renunciar a mantenerse en forma. y, además, quieren hacerlo en plena naturaleza. ¿Desventajas? Sólo el hecho de tenerse que desplazar… Pero para muchos es otra de sus grandes virtudes. En cuanto al gasto, no deja de ser una modalidad bastante asequible: las gamas altas de calzado difícilmente superan los 150 euros (por debajo hay infinidad de opciones) y en textil el gasto no tiene por qué dispararse más allá de los 100-150 euros si se apuesta, también, por gamas altas. Finalmente, respecto a las marcas, como era de esperar todas las grandes vinculadas al outdoor o el running han apostado a ciegas por esta modalidad. Primero con algún modelo específico y luego con gamas más amplias. En el bando del outdoor, el camino lo marca, con diferencia, Salomon, una de las pocas marcas que, antes del boom que se ha dado en los últimos años, supieron ver el potencial de esta categoría. El resto de marcas están haciendo también un muy buen trabajo, dando protagonismo a este tipo de calzado en todas sus colecciones. La lista es larga y encontramos marcas como las españolas Chiruca o Trango, The North Face, Tecnica, Eider, Innov-8 o Vasque. En el bando del running, pasa exactamente lo mismo. Todas las marcas ya cuentan en sus colecciones con modelos para montaña, aunque el enfoque es un poco distinto al de las marcas outdoor y no se piensa tanto en terrenos abruptos, sino más bien en caminos de tierra o montes poco accidentados. Marcas como Mizuno, Asics, Saucony, Brooks o New Balance han apostado muy fuerte por esta categoría. Incluso la generalista adidas lleva años apostando muy fuerte por el Trail, consciente del potencial que tiene y tendrá en los próximos años. A todas estas marcas debemos añadir, además, las que se han superespecializado en textil (con marcas como Under Armour –que también cuenta con líneas de calzado- o X-Technology en cabeza) o complementos como mochilas, calcetines o pulsómetros. Es un subsegmento que mueve mucho dinero, con empresas generalistas y, sobre todo, especializadas, apostando por él y que, si las cosas no cambian mucho, tiene un potencial muy bueno tanto a corto como a medio plazo. El look outdoor se impone en las calles Como hemos dicho en varias ocasiones, el llamado Urban Outdoor es una de las categorías que ha catapultado al mundo outdoor hasta los niveles en los que hoy se encuentra. Algunos puristas no estarán muy convencidos con esta afirmación e, incluso, defenderán que determinadas líneas no deberían considerarse outdoor, pero la realidad es que a pesar de que muchas de estas colecciones poco o nada tienen que ver con el deporte en su vertiente más atlética y están más vinculadas con el factor moda, para muchas marcas y para muchas tiendas, representa un porcentaje considerable del total de sus ventas. Al final, para la mayoría de marcas y tiendas, más allá de mantener un vínculo con lo puramente técnico, lo que cuenta es vender. Y poco debe importarnos si quien lo compra quiere ir al Himalaya o pasearse en moto por su ciudad. Quienes, por deformación profesional o, simplemente, por curiosidad, observamos cómo va vestida la gente, llevamos tiempo viendo cómo determinadas marcas outdoor llenan las calles de las grandes ciudades, sobre todo en invierno, donde las chaquetas de montaña se multiplican exponencialmente en el vestir diario de muchos españoles. Algunos –bastantes- compran líneas técnicas de gama alta o media, seguramente mucho más funcionales de lo que necesitarían para ir a la oficina o pasearse por la calle, pero otros muchos han apostado por colecciones claramente diseñadas para un uso urbano. La maquinaria del marketing consiguió, hace algunos años, poner en boca de todos la palabra Travel. La aventura, el viaje, es algo que siempre ha atraído mucho a los consumidores, y si no pueden permitirse el lujo de irse una semana al Amazonas, a los Alpes o a la India, al El trail está en un punto intermedio entre el outdoor y el running y aprovecha lo mejor de cada uno de ellos. Además, esta ambigüedad representa una muy buena oportunidad para las marcas de los dos segmentos y para las tiendas especializadas en uno y otro universo. ts28 A diferencia de otras categorías del mundo outdoor, el crecimiento del Trail running no responde a un factor moda, sino que ha sido la tecnología y el desarrollo lo que ha dinamizado el segmento. Eso, y la idea cada vez más extendida de que es una modalidad que aporta muchos beneficios físicos y psíquicos. Para unos es una manera perfecta de entrenar resistencia, para otros es una muy buena alternativa para estar en contacto con la naturaleza, y para muchos, es una manera de correr mucho más divertida que hacerlo en ciudad.

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