Industria de la Pintura 57

y la industria COVID'19 DE PINTURAS A medida que la pandemia de COVID’19 ha forzado cambios dramáticos en la vida cotidiana de millones de personas en todo el mundo, la industria de la pintura ha tenido que ir adaptándose a ellos. Los cierres ordenados por el Estado y los requisitos de distanciamiento social han provocado que algunas empresas hayan tenido que tomar decisiones difíciles con el fin de mantenerse en funcionamiento. Para algunos eso ha significado paros laborales y cierres de lugares de trabajo; otros han utilizado y/o mejorado sus capacidades tecnológicas para permitir el trabajo a distancia. En este período las caídas en ventas han sido importantes en la mayoría de los países europeos, situándose entre un 35-45% según indica un informe de BASF1, y las previsiones apuntan a que se tardarán unos 18 meses en alcanzar los valores previos a la crisis. En el artículo de CoatingsPro2 se pueden ver citados numerosos textos relacionados con Covid’19 y la industria de pinturas para el caso de USA, así como una serie de Podcast con entrevistas a dirigentes de industria. También numerosas actividades previstas para este año, como Expoquimia, Paint&Coatins y PaintExpo se han tenido que trasladar a 2021. También ha variado notablemente la forma en que las empresas se relacionan con sus clientes, pasando de la entrevista personal a la teleconferencia y sustituyendo las reuniones presenciales por webinars. Aunque el virus (fig. 1) se transmite principalmente de persona a persona por vía aérea, cuando alguien infectado expulsa mediante la respiración o un estornudo estos virus, estos pueden alcanzar a otra persona que esté cerca y penetrar en su organismo a través de la boca, la nariz o los ojos. Por otra parte, el contagio también puede producirse a través de superficies contaminadas. Según la naturaleza de la superficie, el virus causante de la enfermedad el SARS-Covid-2 puede permanecer en ella desde horas hasta varios días. Por tanto destruir o dañar el virus mientras se encuentre sobre dicha superficie puede prevenir la extensión de la infección. De ahí que, desde la aparición de la pandemia, se haya investigado mucho en el desarrollo de pinturas antivirales.           Pinturas antimicrobianas y antivirales Es bien conocido que las bacterias son microbios vivos que pueden ser destruidos por agentes antibacterianos (antibióticos), mientras que un virus es un agente patógeno, no está considerado un ser vivo y, por tanto, no se puede matar, sino que se ha de desactivar. El virus tiene una capa exterior cargada negativamente y que puede ser destruida por disolventes, ciertas frecuencias UV, calor, cargas muy positivas o interferencia por iones metálicos. La mayoría de los disolventes protonados, como los alcoholes y los tensoactivos (jabones) pueden romper la proteína exterior del virus. Una vez destruida esta proteína no puede interaccionar con la célula humana o su ANR. Las pinturas antivirales son una parte de las pinturas antimicrobianas. Unas y otras, por tanto, comparten propiedades y similitudes pero, mientras que algunas pinturas antimicrobianas pueden matar también virus, además de bacterias y otros microorganismos, otras pueden no estar diseñadas para acabar con ellos. Ya he comentado que las superficies pueden actuar como reservorio de microbios u otras especies de microorganismos. A este respecto pueden obtenerse superficies que inhiban el crecimiento de microbios y/o virus de dos maneras: -El primer método es una modificación física, lo que implica alteración del material y rugosidad superficial. -El segundo método implica un cambio químico. Los cambios químicos pueden incluir adición de grupos específicos a los polímeros, superficies superhidrófobas, uso de nanomateriales y pinturas. Estas pinturas incluyen a las pinturas autolimpiantes y a las que contienen biocidas. Estas últimas pueden tener diferentes mecanismos de actuación. Así, de acuerdo con su modo de acción las superficies poliméricas se pueden clasificar en tres categorías básicas: liberación de biocida, acción oxidativa y acción por contacto. 1. Polímeros que liberan biocidas. Se pueden adicionar a las pinturas componentes con propiedades biocidas que se liberan en la proximidad de las células microbianas (Fig. 2). Estas sustancias pueden ser antibióticos -aunque recordemos que los antibióticos no tienen acción antiviral- o sistemas que liberan iones metálicos. Tales sistemas son muy efectivos a corto (fig. 1) (fig. 2)  

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