Puericultura Market B2B

GESTIÓN DEL PUNTO DE VENTA 103 VÍCTOR VALENCIA CEO Entorno y Estrategia CEO de la UTI Especialista en desarrollo y relanzamiento de comercios detallistas abiertoparatodos2021@gmail.com de ordenadores, bloqueo de parte de los programas, bloqueo de los envíos, etc. • Chantaje: A cambio de no publicar nuestras bases de datos, quitar determinados contenidos, volver la página web a su origen, etc. CIBERDELINCUENCIA EN PEQUEÑOS COMERCIOS La palabra ciberdelincuencia suena a algo que solo puede afectar a las grandes empresas (multinacionales, administración…), y cuando escuchamos que se ha producido un ciberataque contra tal o cual banco, siempre pensamos que a un comercio tradicional nunca le va a pasar algo así, que es demasiado insignificante como para que los especialistas se fijen en estos negocios. Pero nada más lejos de la realidad, los datos demuestran todo lo contrario. En la actualidad, en los establecimientos tradicionales el 99% de los ordenadores son vulnerables, cada día se activan 230.000 softwares maliciosos, y el 68% de los fondos ciber-sustraídos no se recuperan. En el 2020 se contabilizaron, por denuncias, 288.000 ciberdelitos, y eso que no se llegan a denunciar el 20% de todos los que se producen, al ser fruto de negligencias propias. Esto solo hace que demostrar que este tipo de delitos siguen creciendo exponencialmente. Para un comercio tradicional, es impensable que un ciberdelincuente se fije en él, pero si tenemos en cuenta que los más débiles son los más vulnerables, es fácil entender por qué muchos delincuentes roban joyas amujeres mayores en lugar de ir a atracar joyerías. Si el delito es fácil y puede ser repetitivo, puede llegar a ser muy rentable. Una joyería tiene medidas de seguridad, es posible que hasta tenga licencia de armas, y cuenta con sistemas de bloqueo, pero una anciana suele ser una presa fácil, y eso es lo que son los comercios tradicionales para la ciberdelincuencia. Penetrar en el sistema de un pequeño comercio y conseguir claves para poder acceder a las cuentas o suplantar los cobros puede llevar 20 minutos, y se hace incluso automáticamente. Solo con dedicarle tres horas al día, los beneficios pueden ser muy elevados: si ponemos una media de 2.000€ por acción, serían 6.000€ la hora, es decir, 18.000€ al día (“trabajando” solo tres horas). PROTEGER EL PEQUEÑO COMERCIO Muchos establecimientos se piensan que con tener un antivirus y la ley de protección de datos ya tienen cubiertos sus riesgos, y nada más lejos de la realidad, el ciberdelito se comete a través de los accesos desde las webs, los correos, las redes, los servidores, el wifi, los proveedores, e incluso los intermediarios (bancos, instituciones…). Todas estas vías de comunicación se convierten en ventanas abiertas de par en par, es como dejar la verja del comercio levantada por la noche, la puerta abierta y la alarma desactivada. No se trata de asustar a nadie, sino de estar informados para evitar sustos, y es que el auténtico riesgo es el desconocimiento. Desde hace varios años estamos trabajando formando especialistas en estas áreas, y os aseguro que el comercio todavía no es consciente de la magnitud de esta problemática para sus comercios. En contra de lo que pueda parecer leyendo este artículo, la digitalización de los establecimientos es algo necesario, pero hay que tener en cuenta que al digitalizarse se abren ciertas ventanas y puertas en el mundo digital, que es importante mantener protegidas para que no nos puedan desbalijar sin tan siquiera pasar físicamente por el local. Cibersecurizar un comercio es mucho más económico de lo que la gente se pueda pensar, y no requiere costes añadidos, además de ahorrar mucho dinero en software y hardware. Con ello, se compensa con creces la inversión y además permite que el seguro que nos pueda cubrir ese tipo de actos delictivos. Tener en cuenta que un comercio de puericultura es un establecimiento donde la información que manejamos es muy valiosa y sensible. Una mala reputación de falta de celo digital nos puede hundir frente a nuestros clientes, ya no solo por su difusión y que nos demanden, sino para chantajearnos por no hacerlo. Que nadie se asuste, pero sí, que todo el mundo se ponga manos a la obra. El riesgo es muy elevado y las sanciones si se publican datos sensibles y no hemos asegurado el negocio, ya ni os cuento. Por unos pocos cientos de euros no merece la pena asumir el riesgo, así que poneros manos a la obra, es mucho más rentable que las rejas del propio local o que una caja fuerte. n

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