Los seres humanos pasamos la mayor parte de nuestra vida dentro de edificios. Trabajamos, nos relajamos, damos rienda suelta al ocio, comemos, dormimos o practicamos deporte entre cuatro paredes. Pero desde ACSOS queremos incidir en que salud y rentabilidad van unidos. Queremos que las personas vivan, trabajen y se recuperen en edificios y hospitales más sanos y sostenibles, pero sin olvidar que estos edificios los operan compañías en un entorno de negocio competitivo. LA SALUD ES RENTABLE Un reciente estudio, realizado por el International WELL Building Institute (IWBI), titulado “Health pays back”, analiza esta cuestión desde cuatro puntos de vista: el retorno económico de la calidad del aire; las mejoras en la productividad; los ahorros en la gestión del activo inmobiliario, y el rendimiento económico real que supone la implementación de mejoras ESG. Pero vayamos punto por punto. En primer lugar, debemos incidir en que los edificios saludables son sinónimo de economía saludable. Desde el IWBI estiman en 38.000millones de dólares los beneficios económicos derivados de un aumento de 8 a 15 litros por segundo en los índices de ventilación en oficinas de EEUU. En segundo lugar, un edificio saludable alberga apersonas y organizaciones saludables y más productivas. Por ejemplo, la calidad ambiental interior produce un aumento de la función cognitiva de las personas que trabajan o habitan en el edificio de entre un 61% y un 101%. En el caso de oficinas, estos ratios permiten una mitigación del absentismo laboral, pero también del “presencialismo” mal entendido, que conlleva alargar en exceso las jornadas con un bajo rendimiento real. Poniendo un ejemplo cercano dentro de nuestra actividad, mejorar la ventilación en 1 l/ seg./persona, conlleva una disminución de hasta un 1,5% en bajas laborales. Finalmente, es importante indicar que cada dólar invertido en programas y acciones que mejoren la salud y el bienestar representa un ahorro de 3,27 dólares en costes sanitarios, lo que supone más de dos tercios de ahorro. CERTIFICACIÓN Y RENTABILIDAD VAN UNIDOS Y así llegamos al tercer punto, focalizado en la mejora de los retornos de las inversiones inmobiliarias gracias a la certificación de edificios saludables, una actividad en la que somos expertos en ACSOS. Según el estudio del Instituto WELL, los edificios saludables certificados disfrutan de un aumento en sus rentas de alquiler de entre un 4,4 y un 7,7%, en comparación con otros inmuebles cercanos no certificados. El estudio destaca además algunas soluciones constructivas que pueden aumentar el valor de la propiedad y mejorar esas cuotas. Las claves pasarían por aplicar correctamente la biofilia, la iluminación natural y la ergonomía. La presencia de vegetación en el entorno mejora la productividad y la salud física y mental de las personas. Además, soluciones arquitectónicas como los jardines verticales permiten mejorar la inercia térmica de los edificios, con el consiguiente ahorro energético en climatización. Es importante destacar también que los entornos sin iluminación natural afectan negativamente a la calidad del sueño e incluso pueden provocar una pérdida de agudeza visual y de capacidad de concentración. Cuidar este aspecto permite a las empresas compatibilizar salud laboral y productividad. Finalmente, cuidar la ergonomía en el diseño de los espacios es igualmente clave a la hora de mejorar la salud de los trabajadores y aumentar sus ratios de productividad. ESG, CLAVE PARA LA MEJORA DEL VALOR ACCIONARIAL En cuarto y último lugar, quiero incidir en cómo el cuidado de los aspectos ESG redunda en un mejor cuidado de la salud de los trabajadores y, consecuentemente, en mejores decisiones de inversión. En los últimos 14 años, la inversión en salud y bienestar de los empleados se ha visto recompensada por una mejora del 325% en el valor accionarial de las compañías que la han implementado, en comparación con el 105% alcanzado de media. Además, aquellas empresas que recibieron puntuaciones altas en parámetros como “evaluación de bienestar” mejoraron su valor un 235%en comparación con el índice S&P 500 general. Los datos demuestran sin duda que la salud de las personas y la rentabilidad de las empresas van unidos. n
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