IN607_El Instalador

TRIBUNA DE OPINIÓN El poder de los edificios Si estas leyendo este artículo, concéntrate e interioriza que ahora mismo estás respirando entre 8 ó 10 litros de aire por minuto. Si lo asimiláramos a beber agua ¡sería el equivalente a beber 8 botellas de litro al minuto! Otro dato; en espacios interiores como mínimo, aproximadamente el 4% del aire que recientemente has respirado, ha salido previamente de los pulmones de otras personas. Siguiendo con el símil del agua ¿Beberías las secreciones de algún compañero? Evidentemente no ¿Beberías de la botella o del vaso de alguien? Está claro que ahora somos mucho más cautos a la hora de hacer esas cosas. Tomás Higuero. Consejero delegado de Aire Limpio ENTENDER POR QUÉ LOS PATÓGENOS SE DISEMINAN POR EL AIRE INTERIOR, ES COMPRENDER LA CANTIDAD DE AIRE QUE RESPIRAMOS La realidad es que respirar el aire de otro no es tan relevante para nuestra salud, además es inevitable. El problema es cuando ese alguien está enfermo. Una persona con infección está constantemente lanzando virus adheridos a pequeños aerosoles al aire interior de un edificio. En un espacio interior, el número de patógenos o contaminantes de otra procedencia, que introduces en tu metabolismo, depende solamente de un factor: la calidad de las instalaciones de dicho edificio. Muchos inmuebles tienen problemas tanto en la renovación como en la filtración del aire. En un edificio con buena calidad del aire (adecuada ventilación/excelente filtración) la tecnología permite que el porcentaje de aire que respiras procedente de los pulmones de tus compañeros sea limitado a un nivel tal, que la probabilidad de infección se reduzca muchísimo. Ese es el poder de los edificios; nos pueden mantener sanos o hacernos enfermar. A lo largo del siglo XXI, las compañías ocupantes, propietarios, diseñadores han tratado de hacer de los centros de trabajo lugares más atractivos, amigables… todos hemos presenciado la implementación de diversas amenidades: gimnasios, cafeterías, chill-out, futbolines, etc…las cuales tienen su importancia a la hora de fomentar el compañerismo, creatividad, colaboración. En general, en dicho proceso se prestó la mínima e imprescindible atención a las instalaciones del edificio, con el resultado que la calidad del aire se resentía o en el mejor de los casos era sólo aceptable. Muchos opinan que todo eso ha cambiado. De hecho, una gran diversidad de actores que debaten cómo debe ser el trabajo en nuestro mundo post pandémico están destacando algo que debería haber sido esencial desde hace muchos años: tener un aire interior de buena calidad en la oficina. "Las buenas prácticas en salud, calidad de aire y wellness han llegado para quedarse" Recientemente un grupo de investigadores argumentó en Science: “En el siglo XXI debemos sentar las bases para asegurar que el aire dentro de nuestros edificios está limpio... de la misma manera que damos por hecho que cuando abrimos el grifo en nuestras casas el agua que sale es potable”. En Salud Publica se aplica el mismo principio que en toxicología, la dosis hace al veneno. A menor número de contaminantes dentro de los inmuebles, mejor para nuestra salud. NUEVA OFICINAS CON BUENA CALIDAD DEL AIRE INTERIOR Las buenas noticias son que las oficinas de nueva generación son excelentes, la mayoría tienen estupendas instalaciones y, por tanto, buena calidad del aire interior. 56

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