ICANDELA_CN44

De manera complementaria, la iluminación artificial del perímetro de la estructura está dirigida hacia las obras. En conjunto, la rica paleta de materiales empleados como hormigón, madera, yeso, ladrillo, mármol de carrara y estructuras metálicas con acabado de pintura poseen tonos claros. Como característica general, hay una prevalencia de edificios envueltos en ese color como el Paimio Sanatorium de Alvar Aalto construido en 1933. Aun así, se desvía del cliché modernista de aspecto frío y añade comodidad con humanidad en un ambiente usualmente inhóspito. No obstante, utiliza el blanco puramente como fondo reflector, como lienzo. Preparándose para las pinceladas de colores inevitables, generalmente de la gama del cielo nórdico: azul, amarillo, rosado en las llamadas ‘zonas de transición’ (5). El resultado fue tan exitoso que sirvió como ejemplo para los demás sanatorios construidos en el inicio de la 3ª década del siglo XX, puesto que Finlandia estaba en emergencia sanitaria debido a tuberculosis respiratoria que afectaba la población (6). Sin la existencia de una medicación efectiva, el arquitecto finlandés empezó a conceptualizar lo que llamaríamos ‘arquitectura sanitaria’. Es decir, a utilizar el diseño de los espacios y sus aberturas como medidas para el bienestar de los enfermos incorporado en el proceso de recuperación. Además de la introducción de conceptos importantes como el contacto con el exterior, la renovación del aire, la luz solar y la luz artificial entre otros en la jerarquía de necesidades. En las zonas de transición del Paimio Sanatorium se ha apostado por la gama nórdica como el amarillo, influye en el proceso de recuperación de los pacientes. Foto: Pieter Lozie Reproducción litográfica de Alvar Aalto en su obra ‘Second nature’. 10 AULA CD

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