Más de la mitad del talento farmacéutico en España son mujeres, pero solo una de cada cinco alcanza puestos directivos
El sector farmacéutico español mantiene un peso creciente en la economía nacional y se afianza como una de las principales fuentes de empleo cualificado. No obstante, la competencia por atraer talento joven, la falta de relevo generacional y la brecha de género en los cargos de dirección siguen siendo tres de los grandes desafíos a los que se enfrenta la industria. Según un análisis elaborado por Synergie España a partir de datos de LinkedIn Talent Insights, el 88% de las compañías reconoce dificultades para incorporar profesionales jóvenes, mientras que únicamente una de cada cinco mujeres logra acceder a la alta dirección.
Según el análisis de Synergie España, solo el 22% de las consejeras delegadas y 21% de las directoras comerciales son mujeres en el sector farmacéutico español.
El informe revela que la industria farmacéutica cuenta con 107.000 profesionales activos en España y experimenta un crecimiento del 2% interanual en Europa. Madrid y Barcelona concentran la mayor parte de este personal, con 32.000 y 24.000 trabajadores respectivamente, aunque Girona registra un incremento destacado del 11,5%. Cataluña representa el 34% del talento nacional y continúa atrayendo perfiles internacionales cualificados.
La formación universitaria constituye otro de los pilares del sector. La Universitat de Barcelona y la Universidad Complutense de Madrid se sitúan entre las tres principales instituciones europeas generadoras de talento farmacéutico. Las titulaciones más frecuentes son Farmacia, Administración y Dirección de Empresas, Química, Marketing y Biotecnología, lo que evidencia el carácter multidisciplinar de la industria.
El estudio también señala que la edad media de los profesionales supera los 43 años, con más de la mitad mayores de 45. Los menores de 30 apenas representan el 30,8% del total, lo que refleja la dificultad para atraer nuevas generaciones en un mercado caracterizado por la alta competencia intersectorial y la evolución de las expectativas laborales.
En materia de diversidad, las mujeres constituyen el 55% del personal, aunque su representación en los puestos de alta responsabilidad sigue siendo reducida: solo el 22% de las consejeras delegadas y el 21% de las directoras comerciales son mujeres. Sin embargo, el liderazgo femenino avanza especialmente en áreas técnicas, normativas y asistenciales, donde supera el 80%.
El sector se mantiene entre los mejor remunerados del país, con un coste laboral medio superior a 60.000€ anuales frente a los 37.500€ de la media nacional. Las posiciones más retribuidas se localizan en Dirección Médica (90.000–180.000€), I+D (hasta 150.000€) y Product Management (70.000–110.000€).
Conciliación y propósito, prioridades del nuevo talento farmacéutico
La especialización creciente y la escasez de candidatos cualificados obligan a las empresas a redefinir sus estrategias de atracción y retención de profesionales. Según Synergie España, la posición de farmacéutico o farmacéutica presenta 145 vacantes y solo 39 aspirantes por oferta, lo que evidencia un desequilibrio notable entre oferta y demanda.
De acuerdo con una encuesta de LinkedIn, los factores más valorados por los trabajadores del sector son la remuneración y los beneficios (66,9%), la conciliación (64,5%), la flexibilidad (41,3%) y un entorno motivador (40,5%). La cultura corporativa y el sentido de propósito adquieren, por tanto, una relevancia creciente para fidelizar talento.
Sergi Vilella, Project Manager de Health Care & Pharma en Synergie España, sostiene que “el reto para el sector no es solo mantener su liderazgo tecnológico, sino también su capacidad de atraer y retener a las nuevas generaciones. La combinación de igualdad, formación continua y employer branding será decisiva para garantizar que el talento farmacéutico siga impulsando la innovación y el crecimiento en España”.
Synergie subraya que la industria cuenta con una sólida base formativa, un liderazgo femenino en expansión y una remuneración superior a la media nacional, factores que sitúan al sector en una posición ventajosa para consolidar un modelo de empleo sostenible, innovador y con impacto social.




























