Reciclaje de plástico
¿Alguien quiere poner a prueba su olfato?
Uno de los aspectos menos agradables del reciclado mecánico es la pestilencia que desprenden los lotes de residuos plásticos postconsumo. Al fin y al cabo, cierto nivel de contaminación, atribuido a elementos como fragmentos de relleno y aditivos, aún permanece tras la fase de lavado y puede generar olores indeseables en la fusión de los rechazos de plástico, lo que dificulta que el reciclado sustituya a la resina virgen en los nuevos productos acabados, especialmente los que se acercan a la nariz del consumidor final. Este dilema impulsó a la alemana Kreyenborg, especialista en equipos de secado, cristalización, almacenamiento, mezcla y dosificación de plástico, a lanzar una nueva solución.
La idea tomó forma con la solución IR-Fresh, una máquina modular diseñada para eliminar el olor remanente en insumos no perjudiciales contenidos en copos o gránulos de, especialmente, poliolefinas postconsumo destinadas al reciclaje para su reutilización en aplicaciones de alta calidad.
El pistoletazo de salida para el IR-Fresh fue la experiencia acumulada por la empresa de Senden (Renania del Norte-Westfalia) en soluciones de descontaminación, cristalización, secado y calentamiento de PET postconsumo de materiales a granel mediante tecnología de infrarrojos.
En el primero de los dos pasos del proceso IR-Fresh, el material se calienta rápidamente hasta alcanzar el nivel de temperatura óptimo para el polímero en cuestión mediante un módulo de infrarrojos instalado sobre el lecho de material en el equipo de tratamiento. “La rotación continua del tambor garantiza un flujo de masa homogéneo con un tiempo de permanencia definido (principio de “primero en entrar, primero en salir”) y gracias a los elementos de rotación y mezcla integrados en las espirales, el material se mezcla continuamente en el tambor con un cambio de superficie constante. Y esto, combinado con un calentamiento controlado, garantiza una eliminación significativa de los olores incluso con tiempos de permanencia muy cortos.", explican desde Kreyenborg.
En el último paso, las sustancias olorosas restantes en los copos o pellets se eliminan en el equipo de tratamiento mediante una limpieza físico-térmica.
La interacción de los parámetros clave del proceso son el caudal de aire, temperatura y tiempo de permanencia, que ofrecen unos resultados excelentes de desodorización y descontaminación, siendo también posible integrar el sistema de desodorización como un paso más en la cadena del proceso o utilizarlo como una solución independiente.
El sistema IR-Fresh se recomienda sobre todo para descontaminar polietileno y polipropileno, especialmente en la descontaminación de reciclados procedentes de la recogida de residuos domésticos.
Los reciclados procedentes de la recogida doméstica o de aplicaciones tipo depósito de combustible soplado se caracterizan por un olor intenso y esto se debe a que, a medida que los residuos se deterioran, los olores resultantes acaban migrando al plástico.
Para los residuos de PET, por su parte, las soluciones descontaminantes de Kreyenborg son sus reconocidos sistemas IRD e IR-Clean.
En este caso, el sistema IR-Clean de Kreyenborg ofrece una alternativa atractiva y rentable para el reprocesamiento directo de escamas de PET postconsumo para envasado de alimentos, sin utilizar ninguna tecnología de vacío y como solución adaptable a las líneas de extrusión existentes. La eficacia del proceso de limpieza ha sido confirmada por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE UU (FDA). Del mismo modo, también cumple con los criterios establecidos por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) para el uso de materiales reciclados en envases en contacto directo con alimentos.
El proceso con IR-Clean
El material de reciclado de PET se transporta al sistema de dosificación del IR-Clean y se introduce en el tambor rotativo. El tambor rotativo garantiza un flujo de masa homogéneo con un tiempo de permanencia definido (principio de primera entrada / primera salida). Gracias a la rotación del tambor giratorio y a los elementos de mezcla integrados en el mismo, el material se mezcla continuamente con un intercambio de superficie simultáneo y constante.
El módulo de infrarrojos instalado sobre el material calienta el material rápida y directamente a un nivel de temperatura elevado.
El aire cargado de humedad sale del IR-Clean a través de una corriente de aire constante. Después de minutos, en lugar de horas, el material sale del IR-Clean y está disponible para el siguiente paso del proceso: el IR-Clean+.
Es la combinación del sistema IR-Clean con un deshumificador permite una mayor reducción de la contaminación y tiene la ventaja añadida de la reducción a < 50 ppm de humedad residual. El sistema IR-Clean+ también incluye todos los componentes necesarios del sistema, como equipos de transporte, unidades de filtrado y un paquete de control completo que incluye documentación continua del proceso.
En definitiva, una gran solución con cristalización y secado en un solo proceso.
Kreyenborg está representada por Coscollola en España y Portugal.