Cuidado de la piel en el posparto: la piel no necesita presión, necesita comprensión
El posparto es una etapa de reajuste en muchos niveles y la piel no es una excepción. Los cambios hormonales, la falta de descanso y las nuevas rutinas pueden hacer que el rostro se vea más apagado o sensible. Lejos de presionar a las mujeres por recuperar una piel ideal, lo más importante es ofrecerle lo que necesita: productos adecuados, gestos suaves y constancia sin exigencias.
“La piel en el posparto no necesita presión, necesita comprensión”, señala Jenifer Alonso, facialista y fundadora de Infinittime, centro de belleza con sedes en Salamanca y Madrid. “Es una etapa en la que la piel puede mostrar más sensibilidad, deshidratación, inflamación o brotes, especialmente si ya existía una tendencia previa al acné o la rosácea”.
Manifestaciones cutáneas habituales durante el posparto
El profesional de la estética debe tener en cuenta que, tras el parto, muchas mujeres pueden presentar:
- Deshidratación profunda, relacionada con los cambios hormonales o la lactancia
- Acné
- Inflamaciones localizadas, enrojecimiento y mayor sensibilidad
- Manchas o hiperpigmentación, especialmente si no se utiliza fotoprotección
- Falta de luminosidad y tono apagado, como consecuencia del cansancio y la bajada de estrógenos
Una rutina minimalista, segura y eficaz
Activos recomendados en el posparto
Los ingredientes deben ser seguros, eficaces y compatibles con la lactancia, si la hubiera. Algunos de los más recomendados para esta etapa son:
- Ácido hialurónico (en distintas formas moleculares): hidratación profunda sin riesgo de irritación.
- Niacinamida (vitamina B3): refuerza la barrera cutánea, calma y regula el sebo.
- Pantenol (provitamina B5): calmante y regenerador, ideal para pieles reactivas.
- Centella asiática: estimula la síntesis de colágeno y mejora la elasticidad.
- Ceramidas: restauran la barrera lipídica y combaten la sequedad.
- Vitamina C (en derivados estables): aporta luminosidad, mejora el tono y ayuda con la hiperpigmentación.
- Aceites vegetales prensados en frío (jojoba, rosa mosqueta, almendra dulce): nutren, suavizan y mantienen la elasticidad.
Activos a usar con precaución
Durante esta etapa, la piel puede estar más reactiva o sensibilizada. Algunos activos siguen siendo útiles, pero requieren una aplicación consciente y bien dosificada:
- Retinol y derivados de la vitamina A: en pieles sensibilizadas pueden provocar descamación o enrojecimiento.
- Ácidos exfoliantes fuertes (salicílico o AHA en altas concentraciones): mejor iniciar con dosis bajas.
- Aceites esenciales: aunque naturales, algunos son irritantes. Evitar su uso en zonas sensibles.
- Hidroquinona: despigmentante eficaz, pero agresivo; se recomienda optar por alternativas suaves y restringir su uso a zonas localizadas.
Acompañar sin presionar: la clave del tratamiento profesional
En Infinittime, cada tratamiento parte de la observación, la escucha y una propuesta realista, pensada para mujeres reales, en momentos reales de su vida.



