La nueva presentación de la colección activará el diálogo entre Miró y la arquitectura de Sert mediante más de un centenar de obras del artista

La Fundación Joan Miró hará de la arquitectura el eje vertebrador de su programación en 2026, en el marco de la Capitalidad Mundial de la Arquitectura en Barcelona y de la segunda parte de la celebración de su 50 aniversario. La propuesta se despliega a través de la nueva presentación de la colección, exposiciones dedicadas a Kapwani Kiwanga y Charlotte Perriand, una programación pública y social transversal y varios proyectos internacionales que refuerzan el diálogo entre arquitectura, arte y contexto cultural contemporáneo.

La Fundación Joan Miró estructurará su programación de 2026 en torno a la arquitectura como eje conceptual, en un contexto marcado por la designación de Barcelona como Capitalidad Mundial de la Arquitectura y por la segunda fase de la conmemoración del 50 aniversario de la institución. Esta orientación plantea la arquitectura desde una perspectiva ampliada, entendida no únicamente como disciplina constructiva o formal, sino como marco cultural que articula modos de vida, organización del territorio y proyección de futuros posibles.

La propuesta se fundamenta en el legado de Josep Lluís Sert y se desarrolla a través de diversos ejes programáticos:

• La nueva presentación de la colección, concebida como un diálogo entre la obra de Joan Miró y la arquitectura de Sert.
• La primera exposición monográfica en el Estado de Kapwani Kiwanga, ganadora de la novena edición del Premio Joan Miró. 
• La primera gran exposición antológica en el Estado dedicada a Charlotte Perriand, figura clave del diseño y la arquitectura moderna, vinculada al Atelier Le Corbusier y estrechamente relacionada con Sert y Miró.
• Programación pública y social transversal que, en su conjunto, sitúa la arquitectura como herramienta crítica para la interpretación del presente, la lectura del pasado y la construcción de nuevos horizontes culturales.

En marzo de 2026, la entidad presentará la reordenación de la colección, una exposición que recupera el planteamiento original con el que Josep Lluís Sert y Joan Miró concibieron el edificio como un conjunto en el que arquitectura y obra establecen una relación orgánica, permeable y luminosa. La nueva lectura toma como referencia una carpeta de trabajo de Miró de la década de 1950, titulada Círculo, que reúne imágenes vinculadas a las nociones de espacio y tiempo.

La propuesta expositiva se articula a partir de los procesos de trabajo del artista, prescindiendo de criterios formales o historicistas. Asimismo, contempla la apertura al público del Jardín de los Cipreses y la recuperación de la luz natural, configurando un recorrido que sitúa el propio edificio como elemento central del patrimonio mironiano. La conservación y presentación de la Colección cuentan con el apoyo continuado de la Fundación Vila Casas.

La primera exposición monográfica en el Estado dedicada a Kapwani Kiwanga, Premio Joan Miró 2025, se inaugurará el 29 de abril con el apoyo de la Stavros Niarchos Foundation (SNF) y Cupra. Concebida específicamente para la fundación, la muestra aborda una práctica artística que, sin inscribirse de forma estricta en el ámbito de la arquitectura, desarrolla una estructura conceptual sólida orientada al análisis de la materialidad, los sistemas de explotación, los intercambios económicos y las temporalidades geológicas que configuran la relación entre los cuerpos y los espacios.

La exposición profundiza en las investigaciones de la artista en torno al diseño, el espacio, las dinámicas de control y las construcciones de identidad, y propone nuevas vías de lectura de la arquitectura y de sus estructuras de poder desde una perspectiva contemporánea.

Durante 2026, el Espacio 13 estará comisariado por Alejandro Alonso Díaz, quien desarrollará un ciclo que articula el diálogo entre arte contemporáneo y arquitectura a partir del análisis de los procesos invisibles que sostienen los espacios construidos, como los ritmos internos, los flujos energéticos, la circulación de materiales y las tensiones emocionales y sistémicas. El programa se realiza con la colaboración de la Fundació Banc Sabadell.

El ciclo incluirá exposiciones de Huaqian Zhang, Michael Kleine, Ghislaine Leung y Victor Ruiz Colomer, así como una intervención de Camilla Wills en el vestíbulo. La propuesta concibe los edificios como ecosistemas vivos, sensibles y políticos, y contribuye a ampliar el diálogo interdisciplinar que articula la programación de la Fundació Joan Miró en 2026.

En octubre, se presentará la primera gran exposición antológica en el Estado dedicada a Charlotte Perriand, figura clave del diseño y de la arquitectura moderna. La muestra aborda una trayectoria marcada por la defensa de una síntesis transversal de las artes como herramienta para transformar las formas de habitar, un planteamiento que establece un diálogo directo con las miradas de Josep Lluís Sert y Joan Miró. La exposición cuenta con el patrocinio de la Fundación BBVA.

El proyecto expositivo profundiza en el periodo de Perriand en el Atelier Le Corbusier, en los encargos realizados para el Gobierno francés y en su relación con Sert, así como con arquitectos y artistas catalanes vinculados al Pabellón de la República. Asimismo, incorpora por primera vez documentos y piezas procedentes de su archivo personal, que ponen de relieve la intensidad de estas colaboraciones y su aportación a una concepción de la arquitectura más situada y humana.

La programación pública y social estará presente de forma transversal en el conjunto de las exposiciones. La Fundació Joan Miró incorporará espacios de mediación permanentes a lo largo del recorrido museístico, laboratorios performativos y una amplia serie de proyectos educativos vinculados al Premio Joan Miró, entre los que se incluyen la Red de Escuelas y el espacio participativo desarrollado por la artista Maguette Dieng. Concebida como un ámbito crítico, sensorial y participativo, esta mediación contribuye a redefinir el museo como un ecosistema vivo. La programación de 2026 articulará memoria, análisis y proyección exterior con el objetivo de reforzar el papel de Barcelona y de la Fundació Joan Miró en las conversaciones internacionales en torno a la arquitectura y la cultura.

En el ámbito de las exposiciones internacionales, la vigencia de Joan Miró a escala global se concretará en 2026 mediante tres proyectos de gran formato, enmarcados en la conmemoración del 50 aniversario de la Fundació Joan Miró. 'Miró and the United States' se presentará del 21 de marzo al 5 de julio en The Phillips Collection de Washington, con un enfoque en la relación creativa e institucional que el artista mantuvo con Estados Unidos a lo largo de dos décadas.

En agosto de 2026, Joan Miró. Women, Birds, Stars, integrada por un centenar de obras, se exhibirá en São Paulo con el objetivo de proponer una nueva lectura de los principales motivos simbólicos de su producción. Por su parte, Affinities. Joan Miró, his cities, his artist friends inaugurará en septiembre en el Shenzhen International Art Museum, marcando la primera ocasión en que parte de la colección 'Homenaje a Miró' se presenta en China. En conjunto, estas itinerancias amplían el diálogo del legado mironiano con otros contextos geográficos y refuerzan la proyección internacional de su obra.

En paralelo, las nuevas ediciones del programa Abrir el archivo permitirán el acceso público a los materiales preparatorios que Joan Miró donó íntegramente a la institución. Concebido no como un espacio de reserva, sino como un dispositivo de lectura procesual, este ámbito se consolidará en 2026 como un espacio de activación de una obra artística y arquitectónica en curso, con dos presentaciones previstas, entre ellas Abrir el archivo 08, dedicada a la obra Sin título (1930) y a sus esbozos asociados.

Asimismo, el vestíbulo del museo reforzará su función como espacio dedicado a la fotografía y a la experimentación visual mediante tres exposiciones centradas en la obra de Joan Casellas, Joaquim Gomis y Camilla Wills. Esta línea de trabajo consolida el vestíbulo como un laboratorio en el que memoria, documento y arquitectura cotidiana establecen un diálogo continuo.