Nuevo centro de difusión tecnológica de Guadalajara y nuevo Ayuntamiento de Cájar (Granada)

Desde Vivendio Sostenibilidad Energética queremos compartir con nuestros lectores dos de nuestros proyectos recientes, los cuales ejemplifican la importancia de la rehabilitación como uno de los pilares fundamentales de nuestra empresa. En primer lugar, hemos empleado la rehabilitación como punto de partida para la recuperación de un emblemático edificio ubicado en la Plaza del Concejo en Guadalajara. Este proyecto ha permitido revitalizar una estructura histórica, preservando su valor arquitectónico mientras se mejora su funcionalidad y sostenibilidad.

En segundo lugar, hemos demostrado nuestra experiencia en arquitectura social al aplicar nuevas técnicas de eficiencia energética, especialmente en la envolvente, durante la construcción de un nuevo ayuntamiento en la localidad de Cájar, provincia de Granada. Al enfocarnos en la maximización de la eficiencia energética, hemos logrado optimizar el rendimiento del edificio, reducir su huella ambiental y mejorar la calidad de vida de los usuarios y habitantes del lugar.

Nos gustaría enfatizar nuestra sólida experiencia en proyectos de rehabilitación energética e impacto social, los cuales son una parte integral de nuestra actividad. Estos proyectos han permitido a Vivendio forjar una marca propia, altamente reconocida y confiable por nuestros clientes.

En respuesta a estas necesidades, el equipo técnico del Ayuntamiento emprendió una transformación completa del edificio, preservando su estructura original. Se implementaron medidas para mejorar el aislamiento térmico y acústico, así como para garantizar la seguridad y accesibilidad de las instalaciones. Estas renovaciones permitieron convertir el edificio en un espacio, que cumple con los estándares de calidad y funcionalidad requeridos para satisfacer las necesidades de la comunidad local.

El primer proyecto al que hacemos referencia fue promovido por el Ayuntamiento de Guadalajara y planteaba la rehabilitación del emblemático Edificio del Centro Cívico de la Plaza del Concejo, comúnmente conocido como ‘edificio negro’. Bajo la dirección del arquitecto municipal, José Ignacio del Castillo Fernández, este proyecto se convirtió en un destacado ejemplo de innovación arquitectónica en la ciudad.

El edificio, compuesto por cinco plantas sobre rasante y una planta sótano, se sometió a una rehabilitación integral, con el objetivo de brindar servicios sociales a los vecinos. Antes de la intervención, el edificio carecía de los requisitos mínimos establecidos en el Código Técnico de la Edificación, ya que no contaba con ningún tipo de aislamiento térmico o acústico, ni cumplía con los estándares de seguridad y accesibilidad exigidos.

El resultado exitoso se consiguió con alguna de las siguientes actuaciones:

• Se reemplazó el muro cortina existente por uno nuevo que cumple con los estándares actuales de aislamiento térmico y acústico, considerando también las cargas adicionales en la estructura. Se utilizó un sistema de cerramiento de fachada ligera compuesto por un muro autoportante con tapeta de aluminio extruido de alta calidad y anodizable, que ofrece mayor resistencia a las manchas y protección contra la corrosión. Para evitar la entrada de aire, se utilizó una junta de compresión interna de EPDM y se garantizó el aislamiento térmico, mediante la incorporación de una capa de poliamida de 34 mm de espesor sobre la estructura, tanto en posición horizontal como vertical. El acristalamiento se realizó con vidrio tipo SGG Climalit Plus Cool-Lite Securit, junto con gas argón en el interior para mejorar la eficiencia térmica del edificio.
• Se implementó una fachada vegetal en las zonas este y oeste del edificio, que sirve como transición entre el muro cortina y los edificios colindantes. Este sistema hidropónico involucra la instalación de láminas donde se propicia el crecimiento de plantas, junto con un sistema de riego totalmente automatizado que proporciona agua desde la parte superior, permitiendo que caiga por su propio peso para humedecer el soporte. Además, se cuenta con un sistema de recirculación de agua, a través de una bomba peristáltica en la parte inferior, que introduce abono y fertilizante al agua de riego.
• Se mejoró la accesibilidad mediante la construcción de una escalera de conexión entre las diferentes plantas y la instalación de un ascensor accesible, para personas con discapacidad. El ascensor cuenta con seis paradas y seis accesos desde el mismo lado y tiene capacidad para ocho personas.
• Se realizó un cambio y actualización del sistema de climatización, utilizando un sistema VRV altamente eficiente desde el punto de vista energético. Se instalaron unidades interiores de diferentes tipos, según las necesidades de climatización de cada zona.
• Se garantizó la calidad del aire interior mediante la instalación de un recuperador de calor entálpico de alta eficiencia energética, con un intercambiador de contraflujos de aluminio, que alcanza un rendimiento superior al 75%. Esto cumple con los criterios establecidos en el Reglamento de Instalaciones Térmicas en Edificios.
• Se reemplazó toda la iluminación antigua por luminarias empotrables LED de 600x600 de 45 W, con temperatura de color de 4000K, protección IP40, y downlights empotrados en falso techo de 15W, clase II, con temperatura de color de 4000K y protección IP20. Estas luminarias cuentan con un regulador de flujo lumínico para adaptarse a la luz natural disponible.

El segundo caso del que queremos hablar nos lleva a un proyecto singular, en términos de eficiencia energética, con características especiales en cuanto a las terminaciones. Este proyecto, dirigido por el arquitecto Jorge Suso Fernández-Figares, perteneciente al Servicio de Infraestructuras y Equipamientos Locales de la Diputación de Granada, se centra en brindar comodidades tanto a los trabajadores como a los ciudadanos del municipio de Cájar. Se trata de un edificio ejemplar de arquitectura social al servicio de la administración y los usuarios.

El nuevo Ayuntamiento de Cájar, con acceso desde la plaza existente en la intersección de las calles Campanario y Vía del Tranvía, cuenta además con un acceso independiente, a través de una rampa en la parte más baja de la calle de los Huertos. Con una superficie construida de 3.162,69 m2, el edificio alberga salas de reuniones, despachos de diversos tipos, dependencias de la Policía Local y un amplio salón de actos para la celebración de eventos significativos en el municipio.

Uno de los aspectos más destacados de este proyecto, que también contribuye a la eficiencia energética del edificio, es el sistema de envolvente utilizado conocido como Elesdopa (Elemento estructural de doble pared de hormigón armado). Esta solución innovadora en la construcción de paramentos estructurales de doble pared de hormigón armado reemplaza los elementos convencionales utilizados, para la estructura por dos láminas de hormigón unidas mediante llaves conectoras estructurales. En el núcleo interior se coloca una capa aislante, lo que mejora considerablemente los niveles de aislamiento térmico, acústico e inercia del edificio.

Este sistema, que utiliza poliestireno expandido como soporte moldeable, permite la construcción de geometrías complejas autoportantes, como se realizó en este caso concreto. Las armaduras de los conectores atraviesan el soporte mediante perforaciones y se atan a las armaduras de las láminas de hormigón de las caras exteriores. Luego se proyecta el hormigón, comenzando por el relleno de los conectores y continuando con las láminas hasta alcanzar el espesor requerido.

Este sistema es especialmente adecuado desde el punto de vista sísmico, ya que combina la fortaleza de la estructura con una baja masa, lo cual es de suma importancia en la provincia de Granada y sus restricciones antisísmicas. El resultado es una obra de arte con una linealidad continua y un juego de formas que dota al edificio de un esplendor llamativo y característico.

Se incluyen diversas instalaciones destinadas a garantizar la calidad de los servicios, cumpliendo con las normativas vigentes en términos de seguridad, comodidad y accesibilidad. Se llevaron a cabo instalaciones de fontanería y saneamiento, ventilación del estacionamiento para mejorar la calidad del aire, puntos de recarga de vehículos eléctricos, placas fotovoltaicas sin vertido a la red, iluminación LED con control lumínico, sistemas de seguridad contra incendios, climatización con bombas de calor y control centralizado, y suministro de agua caliente sanitaria mediante aerotermia.

Gracias a todas estas mejoras el edificio obtuvo una calificación energética A, tanto en consumo de energía primaria no renovable como en emisiones de dióxido de carbono. Cumple con el Código Técnico de la Edificación superando los niveles mínimos establecidos y satisface todas las exigencias en términos de seguridad contra incendios, uso y accesibilidad, higiene, salud y protección del medio ambiente, protección contra el ruido, así como ahorro de energía y aislamiento térmico. El Ayuntamiento de Cájar se ha convertido en un referente de la arquitectura social del municipio, gracias al cuidado y dedicación de Vivendio Sostenibilidad Energética.

Se completó el acceso al edificio desde la Plaza del Concejo mediante la instalación de un pavimento fotocatalítico, el cual tiene la capacidad de eliminar gases contaminantes del ambiente, mediante un proceso de oxidación activada por la energía solar.

Gracias a toda esta actuación, Vivendio completó los trabajos sobre una superficie construida de 1.360,90 m2, reforzando la acción social presente en el municipio, mediante la rehabilitación energética de un edificio existente y de reconocido prestigio en la ciudad de Guadalajara.