Entrevista a Jordà Salla, director de nuevos proyectos en Bodegas Yzaguirre
Desde 1884, Yzaguirre ha mantenido viva la tradición en la elaboración de sus bebidas, aplicando métodos propios y fórmulas exclusivas que definen el carácter único de sus vermuts, sangrías y vinos —dulces, agridulces y tintos—. Paralelamente, la firma catalana ha sabido incorporar innovación en sus procesos para garantizar una calidad superior. Ese equilibrio entre herencia y vanguardia se materializa en sus nuevas instalaciones en El Morell (Tarragona): un edificio de madera de inspiración gaudiniana concebido como centro de enoturismo gastronómico, donde la marca refuerza su compromiso con la experiencia y el valor añadido.
El año pasado, en 2024, celebraron sus 140 años de historia. ¿Cómo valora la evolución de la empresa?
Muy positivamente, somos una empresa con ganas de crecer, creemos que aún tenemos mucho camino por recorrer, tanto en el mercado nacional e internacional como en nuevas propuestas. Nuestra nueva apuesta por el Enoturismo lo demuestra.
¿Cómo se consigue mantener relevante a una marca tradicional en un mercado cada vez más dinámico y competitivo?
Dando valor a la parte tradicional que realmente aporta valor al producto, pero no dejando que eso influya toda la cadena de valor, aportamos mucho más a nuestros clientes que un producto artesanal.
Todo empezó en Reus, pero recientemente estrenaron un nuevo edificio de 3.500 metros cuadrados en el Morell (Tarragona) destinado a la elaboración, la crianza y la promoción del vermut…
Este nuevo espacio es la culminación de todo el esfuerzo de la familia estos últimos años. También es una apuesta fuerte para el nuevo departamento de Enoturismo, empezamos con las visitas en marzo y el recibimiento está siendo muy bueno. La gente está deseando experiencias de calidad y el tipo de visita que ofrecemos es muy diferente a la propuesta enoturística que encontramos en la zona.
El vermut ha experimentado un resurgir en los últimos años. ¿Cómo ha vivido Yzaguirre este cambio de tendencia y qué estrategias ha aplicado para aprovecharlo?
Ha sido un camino de muchos años de esfuerzo intentando crear marca cuando la mayoría del sector no apostaba en esta dirección. Todo este esfuerzo se ve especialmente recompensado cuando el sector entero experimenta ese resurgir, pero el trabajo viene de mucho antes. La estrategia a futuro sigue siendo la misma, seguir apostando por nuestra marca y nuestro producto.
¿Cuáles son las claves para innovar dentro de un producto tan arraigado como el vermut sin perder su esencia ni alienar al consumidor tradicional?
Aún queda mucho por hacer, tenemos conocimiento y capacidad para hacer muchos tipos de productos, aperitivos, etc. La clave es mantener los productos que funcionan y la gente aprecia e intenta crear nuevos productos para cubrir donde no llegas con tus productos actuales.
Yzaguirre ya no es solo una empresa local con ventas de proximidad, sino que está presente por todo el mundo... ¿En cuántos países se pueden encontrar sus productos?
Ahora mismo nuestros productos están presentes en casi 60 países en casi todos los continentes.
En este sentido, ¿qué importancia tiene el mercado nacional en comparación con el internacional?
El mercado nacional sigue teniendo mucho peso porque somos, con una amplia diferencia, la principal marca nacional. Aun así, cada vez ponemos más foco en exportación y estamos creciendo de manera continuada.
En los 4.000 metros cuadrados de la planta baja del nuevo edificio se ubican decenas de botas (algunas de hasta 100 años) donde madura el vermut.
Y si hablamos de exportación, ¿qué zonas del mundo tienen mayor potencial en un contexto geopolítico tan complejo como el actual?
La coctelería, que hasta hace poco era algo casi exclusivamente anglosajón, se está expandiendo a todo el mundo, se nos abre un mundo de nuevas oportunidades. Si la situación es complicada en alguna zona como Estados Unidos, queda mucho territorio por explorar en zonas como Asia. La clave está en diversificar el riesgo.
¿Cómo trabaja Yzaguirre la relación con los productores locales de materias primas? ¿Qué importancia tiene el origen y la trazabilidad en sus productos?
Llevamos varios años haciendo un trabajo de ir revisando el origen de nuestra materia prima, cada vez vamos acercando más la producción de algunas materias primas claves. Para nosotros, acabar trayendo vino de otros países no tiene ningún sentido, tenemos una buena producción y de calidad excelente.
