El verdadero valor de una plataforma articulada está en su maniobrabilidad

En muchos entornos de obra, industria o mantenimiento, no basta con alcanzar una determinada altura. El verdadero desafío está en cómo llegar de forma precisa, segura y eficiente, sorteando los múltiples obstáculos que el espacio plantea.

Muros, estructuras, instalaciones existentes, techos bajos o espacios congestionados complican el trabajo diario y la tarea de alcanzar el punto exacto, en el ángulo adecuado, sin comprometer la seguridad ni los tiempos de ejecución. Aquí es donde la maniobrabilidad se convierte en un factor decisivo, mucho más allá de la altura o el alcance.

Cuando se planifican trabajos en altura es habitual (y, muchas veces, conveniente) fijarse en los metros que puede alcanzar la máquina. Sin embargo, hay muchos casos en los que esa cifra, por sí sola, no garantiza la eficacia de la intervención.

Plataformas articuladas de mateco.

Los espacios de difícil acceso, la geometría del entorno, los obstáculos en altura o los elementos estructurales obligan a pensar en soluciones versátiles que permitan posicionar al operario justo donde se necesita. Pensemos, por ejemplo, en una instalación eléctrica con cableado aéreo en fachada o una nave industrial repleta de tuberías, vigas y maquinaria. Llegar 'en línea recta' no siempre es posible, ni tampoco seguro, y es aquí donde la maniobrabilidad marca la diferencia.

Las plataformas de brazo articulado aportan una solución técnica específica para estos entornos complejos. Su diseño permite esquivar obstáculos, posicionarse en ángulos complejos y trabajar donde otras máquinas no pueden operar con la misma eficacia.

Una de las principales ventajas de la plataforma articulada es su capacidad para salvar obstáculos en altura gracias a su brazo articulado, lo que permite acceder a zonas de trabajo de difícil alcance. Este tipo de maquinaria está diseñada para facilitar maniobras complejas: sus movimientos combinados, junto con un control proporcional, hacen posible un posicionamiento preciso incluso en espacios congestionados o con limitaciones operativas.

Además, su diseño garantiza una notable estabilidad en terrenos irregulares, pudiendo trabajar en inclinaciones que, en función del modelo, pueden llegar hasta los 5º sin comprometer la seguridad ni el rendimiento. Esta combinación de agilidad, precisión y robustez convierte a la plataforma articulada en una solución versátil, especialmente indicada para sectores como la construcción, el mantenimiento industrial, las instalaciones eléctricas o aquellos trabajos que se desarrollan en entornos urbanos donde el espacio es reducido y las condiciones son exigentes.

En mateco, sabemos que la mejor manera de demostrar las ventajas de un equipo es exponiendo casos reales y prácticos en los que la máquina ha estado a la altura de lo que se necesitaba.

• Sorteando obstáculos en fachadas complejas

En un proyecto reciente de mantenimiento en un edificio histórico, el cliente se enfrentó al reto de acceder a la fachada trasera, donde un entramado de cables de media tensión y salientes arquitectónicos limitaban el uso de plataformas. Gracias a una plataforma articulada, se logró posicionar al operario en un punto seguro, salvando los obstáculos desde una distancia prudente y garantizando tanto la integridad de la instalación eléctrica como la seguridad del equipo.

• Mantenimiento bajo puentes: trabajo 'en negativo'

Otro caso paradigmático se dio en el mantenimiento de un puente urbano. Era necesario realizar unos trabajos de reparación en la cara inferior del tablero, por debajo del nivel de la calzada. Las plataformas articuladas utilizadas permitieron posicionar la cesta 'en negativo', es decir, por debajo del nivel del suelo en el que se encontraba la máquina, sin recurrir a estructuras auxiliares aparatosas. Esta solución no solo optimizó los tiempos de ejecución, sino que garantizó la seguridad en un entorno con tráfico activo.

• Acceso a zonas elevadas en naves industriales saturadas

En el sector industrial, cada metro cúbico de una nave cuenta. En una planta de producción, la necesidad de intervenir en la estructura metálica del techo coincidía con la presencia de maquinaria, líneas de transporte y almacenaje que impedían el acceso directo. La plataforma articulada permitió sortear estos elementos y alcanzar el punto de intervención sin interrumpir la operativa diaria.

En mateco sabemos que cada entorno de trabajo presenta retos específicos. Cuando la maniobrabilidad, la precisión y la seguridad son prioritarias, las plataformas articuladas se convierten en un aliado imprescindible.

Porque no se trata solo de altura, sino de llegar al punto exacto, sorteando obstáculos, salvando estructuras y adaptándose a las condiciones del espacio. Para ello, elegir la máquina adecuada es clave para maximizar la eficiencia y garantizar la seguridad.

En entornos donde lo inaccesible es la norma, la plataforma articulada aporta la flexibilidad, la versatilidad y la seguridad que los proyectos demandan.

mateco cuenta con un parque de más de 8.000 máquinas y un equipo técnico-comercial especializado que asesora a cada cliente para encontrar la solución más eficiente y segura según las condiciones reales de su proyecto.

Un servicio integral que incluye el alquiler flexible, el soporte técnico y la experiencia acumulada de más de 30 años de historia. Porque cada trabajo en altura requiere no solo la máquina adecuada, sino el conocimiento para sacarle el máximo partido.