Nanta y Franco y Navarro realizan un estudio para la mejora de la sanidad y la calidad en ovino
Desde Franco y Navarro y Nanta comenzaran su relación comercial, ambas empresas han trabajado conjuntamente en varios proyectos con un objetivo común: la innovación y la mejora para el sector ovino. Transcurridos veinte años de desarrollo de un exhaustivo estudio, presentan ahora sus conclusiones, según informa Eurocarne.
La situación de partida para este estudio fue la problemática a la que se enfrenta la actividad ganadera de la compra de corderos procedentes de diversos proveedores, es decir, la mezcla de animales de distintas procedencias en una misma granja. Este proceso necesita de la adaptación de los animales a las nuevas instalaciones y a sus nuevos compañeros y, por lo tanto, un riesgo sanitario que se traduce en determinados grados de mortalidad, morbilidad y decomisos en matadero.
Además, la gran cantidad de variables que influyen en el proceso de producción suponen también diferencias en los parámetros que definen la calidad de la carne, por lo que la actividad precisa una labor de clasificación de los animales para ofrecer a la carnicería y a la distribución organizada un producto de calidad y sobre todo homogéneo. Por ello el manejo y la alimentación en este tipo de granjas debe ser riguroso si se busca la calidad inherente al producto del que estamos hablando, principalmente Ternasco de Aragón.
Las dos empresas decidieron estudiar aquellos aspectos que pudieran influir en la sanidad de los animales y en la calidad final de su carne pero se encontraron con una escasez de datos en la literatura científica, por lo que optaron por en una recogida de información sistemática y perseverante en varios puntos de análisis, como son por ejemplo: aspectos sanitarios, bienestar animal, calidad de canal, mejora y eficiencia zootécnica, productos alternativos naturales y estabilidad y durabilidad del color en el despiece.
El estudio engloba también a otros eslabones de la cadena de producción del cordero, como son los cebaderos y los mataderos. Asimismo, el bienestar animal ha sido una de las premisas perseguidas por ambas empresas, conscientes además de su incidencia en la sanidad y en la calidad del producto final.
Todos estos trabajos han permitido a Nanta la creación de un sistema de gestión para cebaderos de corderos, gracias al establecimiento de las referencias y rangos de tolerancia de los parámetros estudiados. Además esta información permite el diseño de piensos más adecuados y adaptados a las situaciones de cada explotación y a los objetivos de mejora que se persiguen.
Franco y Navarro y Nanta han presentado en Mercazaragoza estos resultados y conclusiones al considerar que son de gran utilidad práctica para el sector pues han contribuido ya a generar valor en la industria del cordero y a la rentabilidad de las explotaciones.