ACCOE considera que los precios del cereal pueden bajar en los próximos meses
El presidente de Asociación de Comercio de Cereales y Oleaginosas de España (ACCOE), Francisco Álvarez de la Lama, ha afirmado que los gobiernos “no han querido controlar a los mercados” y que ahora son los propios mercados quienes les “controlan”. Así lo ha asegurado Álvarez de la Lama, con motivo del X Encuentro Nacional de Operadores de Cereales que se ha celebrado en el marco de la Feria Internacional de Maquinaria Agrícola de Zaragoza (FIMA 2012) y que ha congregado a más de 550 participantes.
Según ha lamentado, el sector ganadero se encuentra en la actualidad con “muchos problemas para pagar” sus gastos en alimentación animal, por lo que es necesario pedir a los gobernantes que “se ocupen más de la agricultura de lo que lo han hecho hasta ahora”. A su juicio, los mercados han acumulado tanto poder que son capaces de repercutir sus intereses sobre la evolución de la cotización de las materias primas. “El más grande siempre gana y ahora los más grandes son los fondos de las materias primas, los grandes inversores o las agencias de calificación, que bajan la nota de un país, devalúan su moneda y ésta arrastra el precio de los cereales”, ha apuntado Álvarez.
Así las cosas, la situación actual del mercado el mercado internacional de los cereales es “muy incierta” y vive uno de los momentos “más raros” que el presidente de ACCOE reconoce haber visto nunca.
Ha considerado que los precios permanecen aún demasiado altos, por encima de los 200 euros la tonelada para el trigo y la cebada, y con unas cotizaciones muy similares para el maíz. En su opinión, con unos excedentes de cereal por encima de los 30 millones de toneladas en los países de Europa del Este en la última cosecha, el precio del grano debería descender de los 200 euros y situarse en torno a los 190 euros la tonelada. Por ello, ha apuntado que los precios “deberían ceder” en los próximos meses, toda vez que Francia aún tiene almacenada cerca de la mitad de su cosecha, cuando en una situación normal este porcentaje debería ser del 30%.
En España, se puede estar registrando una situación de “retención” de la mercancía a expensas de la llegada de las precipitaciones, pero ha instado a los productores a entregar su grano “escalonadamente” para garantizar la estabilidad del mercado.