"Una placa como esta es el sueño de todo arquitecto y diseñador de interiores por su enorme discreción y su extrema facilidad de uso"
Entrevista a Christoph Behling, diseñador industrial
¿Qué es lo que más le gusta de trabajar con Geberit?
Geberit se ha mantenido fiel a su visión: combinar tecnología, infraestructura y estética para crear baños que son realmente visionarios. Y, además, son lo suficientemente valientes como para empotrar las funciones de los productos. El pulsador flotante es un buen ejemplo de ello, puesto que no se puede ver la tecnología o las técnicas de construcción, en otras palabras, los conocimientos que convierten al producto en lo que es. No puede verse absolutamente nada. Por tanto, está claro que para Geberit la innovación no comienza y termina en lo que está en el exterior del producto, es decir, en el pulsador.
El pulsador flotante nació como un simple diseño, sin funciones de ningún tipo. ¿Cómo fue el camino desde ese punto hasta la creación de un nuevo producto?
El aspecto funcional llegó algunos años más tarde, cuando se inventó la extracción de olores. Se me presentó esta nueva idea de extraer los olores desagradables justo en el lugar en el que surgen y, sinceramente, me inspiró. Mantuvimos discusiones sobre la tecnología para averiguar qué tipo de diseño sería necesario a fin de acomodar la función. El pulsador flotante era exactamente lo que necesitábamos, ya que permitía incorporar los requerimientos funcionales y presentar un diseño que transmitía ligereza y espacio. Tomándolo como base, pudimos desarrollar el pulsador Geberit Sigma40 con una unidad de extracción de olores integrada.
¿Cuál fue su trabajo en el proceso de diseño del pulsador flotante?
Lo que hice fue utilizar el pulsador flotante como base para diseñar el pulsador Geberit Sigma40; ello significó convertir lo visible en invisible, y diseñar una propuesta refinada y discreta sin hacer concesiones de calidad. En este caso, el logro real del diseño reside justamente en lo que no muestra. Una placa como esta es el sueño de todo arquitecto y diseñador de interiores por su enorme discreción y su extrema facilidad de uso.
¿Diseñó Sigma50 y Sigma60 sobre esta base?
Sí, y en el pulsador Geberit Sigma60 hemos ido directamente al grano con el concepto de pulsador flotante. El diseño y la tecnología se han reducido a lo más esencial y las funciones que quedan son excepcionalmente sencillas y discretas. Es un ejemplo de convertir diseño en arte; y está perfectamente alineado con la filosofía de Geberit.