Clasificación del trabajador y del entorno de negocio, claves en la gestión del BYOD

Durante el IV Encuentro TIC organizado por ComunicacionesHoy, dedicado al BYOD y sus implicaciones tanto para la empresa como el trabajador, Ignacio Prieto, Responsable de Desarrollo de Negocio Gartner España daba su visión, planteando la paradoja de que si bien, a la hora de entender BYOD, se trata de un entorno que por naturaleza viene de una situación no controlada, con los datos puestos encima de la mesa y la evolución e implantación real de este tipo de soluciones, tenemos claro que BYOD es una situación que tiene una madurez muy elevada. “No es algo que debamos afrontar en el futuro, es una cuestión que tenemos que trabajar hoy en día. Debe darse un conocimiento de los usuarios de cómo, dónde, por qué y para qué se utiliza”, comentaba el representante de Gartner. Y es que desde el punto de vista de la gestión, es necesario conocer todos estos aspectos para incluirlos en una política de BYOD y saber como dar el valor adecuado a ese empleado que quiere utilizar ese tipo de entornos.

Desde el punto de vista de la firma analista hay varios aspectos importantes. La personalización de estos programas es crítico, el conocimiento del usuario y para quién queremos implantar este tipo de soluciones. Uno de los primeros elementos que tenemos que tener encima de la mesa es la generación de un catálogo de usuarios. “Es necesario generar un contrato en el que se ponga en claro los compromisos de responsabilidad y uso que se tienen que hacer con el uso de este tipo de aplicaciones, implementación de políticas de seguridad. Los usuarios deben conocer que puede existir otro modelo de soporte distinto respecto a los que hemos tenido hasta ahora”. En este sentido, los responsables de TICs tienen que ser estrictos con el suministro de dispositivos y el uso que se le va a dar. Igualmente, este tipo de entornos conllevan el pensar tácticamente y no estratégicamente. “El mercado de los terminales y de las herramientas de gestión de los móviles es muy dinámico y por tanto tenemos que ser rápidos y flexibles. Un programa BYOD no es algo estanco, debe revisarse cada 6 ó 12 meses”.

Otros aspectos clave a tener en cuenta, según explicaba Ignacio Prieto, es el impacto de estos programas en la infraestructura existente en la empresa, las nuevas necesidades que surgen en la gestión de la información (posibilidad de que existan y coexistan datos privados y públicos en un mismo terminal), seguridad, el soporte. “El soporte no tiene por qué ser un soporte tradicional, la capacidad de utilizar herramientas del entorno social se está viendo cada vez más, uso de foros, wikis, sin que la empresa tenga que poner recursos a esos empleados para dar soporte a los problemas que surjan”. finalmente, Prieto indicaba como desde Gartner consideran que la gestión de un programa BYOD requiere de un estudio de concesiones frente a beneficios.