Cataluña es la segunda comunidad autónoma que más demanda dispositivos de seguridad, vigilancia encubierta y contraespionaje
Cataluña es uno de los territorios más preocupados por su seguridad en España. Así se desprende del último informe de Espiamos.com en el que Cataluña ocupa el segundo puesto al registrar un 16,8% del total de consumo de esta tecnología, solo por detrás de la Comunidad de Madrid (25,5%) y por delante de Andalucía (16,5%) y la Comunidad Valenciana (11,1%).
Barcelona prefiere las mini cámaras espía
Atendiendo a las estadísticas particulares de Cataluña, el Observatorio Espiamos pone de relieve un crecimiento sostenido en la adquisición y asesoramiento de dispositivos de vigilancia encubierta y contraespionaje en los últimos doce meses en esta comunidad autónoma.
Barcelona se coloca como la provincia en la que más uso se hace de esta tecnología en Cataluña con un 64% de las ventas, y como ciudad es la segunda urbe que más demanda registra con un 11,2% sobre el total de las consultas efectuadas en España. La capital catalana destaca también por registrar un elevado consumo en mini cámaras espía, más que en cualquier otro territorio de Cataluña.
Detrás de Barcelona, Girona, Tarragona y Lleida son, por este orden, los territorios más proclives a utilizar tecnología asociada a la seguridad personal o para empresas. En Girona destaca el crecimiento durante el último año de las ventas de localizadores GPS, y que alcanza más del 26% sobre el total. En Tarragona, por su parte, son los equipos de grabación de audio portátil los que gozan de mayor éxito al representar cerca del 40% de las ventas en la provincia; mientras que Lleida destaca como la provincia con menor consumo de productos espía en Cataluña, con tan solo el 5,4% de las ventas.
Lejos de las capitales de provincia, el uso y consumo de tecnología espía se expande a cerca de medio centenar de municipios, sobresaliendo otras ciudades como L’Hospitalet de Llobregat, Sabadell, Badalona, Terrasa o Reus.
En cuanto al perfil del consumidor, el estudio de Espiamos.com segmenta por grupos de edad a los principales interesados en tecnología y dispositivos de seguridad. Según la compañía, el 35% de las ventas y consultas sobre estos dispositivos recaen sobre personas entre los 35 y los 44 años. Por detrás, les sigue la generación inmediatamente posterior, de entre 25 y 34 años, que representan el 25,5% de las ventas. Las personas comprendidas entre los 45-54 años representan el 20,2% de las ventas y los comprendidos entre los 55 y los 64 años, el 10,5%. Entre los 18 y los 24 años y las personas mayores de 65 no alcanzan en conjunto el 10% del consumo generado.
La preocupación por la seguridad en Cataluña es un factor cultural
Al análisis cuantitativo de los datos sobre el consumo de dispositivos de seguridad, vigilancia encubierta y contraespionaje en Cataluña, los expertos de Espiamos.com añaden conclusiones sobre algunas de las causas por las que la región es la segunda autonomía más preocupada por su seguridad en España.
Según el equipo de Espiamos, “desde el punto de vista socioeconómico, Cataluña siempre ha destacado por ser un territorio referente en innovación y desarrollo de nuevas ideas en España, un motivo de peso para entender por qué, en el caso del tejido empresarial catalán, se le concede una gran relevancia a la protección de información estratégica en las empresas”.
Además, desde el Observatorio Espiamos añaden que “existen factores culturales que explican las estadísticas catalanas en cuanto a consumo de tecnología espía y que guardan relación con una arraigada mentalidad de control y prevención”. Estos factores explican el porqué de que Cataluña sea el lugar donde se concentra un mayor número de empresas especializadas en seguridad en España y un gran caladero de detectives privados.
En cuanto a los recientes acontecimientos sociopolíticos, los analistas de Espiamos.com no aseguran que el proceso independentista sea una consecuencia directa para el repunte de las ventas de dispositivos de seguridad, vigilancia encubierta y contraespionaje de los últimos doce meses en Cataluña pero apuntan que “las continuas informaciones en medios de comunicación relacionadas con la actualidad en Cataluña y el uso de este tipo de dispositivos está creando un interés mayor en la sociedad”.