La industria reclama a la Administración la adopción de medidas urgentes para el transporte de mercancías por ferrocarril

Por otro lado y pese a que la liberalización del transporte de mercancías por ferrocarril en España es efectiva, en teoría, desde el 1 de enero del 2005, dos años después, aparte del operador ferroviario tradicional Renfe, sólo tienen licencia otros dos operadores, los cuales no podrán realizar el primer transporte efectivo hasta dentro de unos meses. Así, en la práctica no se ha producido la liberalización efectiva, esencialmente debido a la falta de velocidad impresa por el Ministerio de Fomento.

Posteriormente, y pese a ser considerado el ferrocarril como uno de los modos más seguros y eficaces, el Consejo de Ministros aprobó el 15 de julio de 2005 el Plan Estratégico de Infraestructuras 2005-2020 (PEIT), el cual no contemplaba inversiones suficientes para el desarrollo del transporte de mercancías por ferrocarril en nuestro país.

Estas medidas supondrán en la práctica el desvío de 700.000 toneladas de mercancías desde el ferrocarril a otros medios de transporte, esencialmente carretera, lo que supondrá:

• Una mayor congestión de la red viaria y sus principales nudos, incrementando la presencia de vehículos pesados en el tráfico rodado, lo que generará una merma evidente de la calidad y seguridad para todos los usuarios.

• Pérdida de la capacidad operativa de las empresas dedicadas al transporte y de los servicios logísticos en nuestro país. Así, empresas de sectores como la automoción o la química (primer y segundo exportadores de la economía española respectivamente), verán seriamente perjudicada su capacidad exportadora y proyección exterior, y la calidad del servicio de abastecimiento a sus clientes intermedios y finales.

En definitiva, con la adopción de estas nuevas medidas, se generará una pérdida de competitividad inasumible en los sectores usuarios y operadores del transporte por ferrocarril.

Por todo ello, el Centro de Promoción del Transporte de Mercancías por Ferrocarril, invita a la Administración Española a que:

• Se aplacen los nuevos planes de Renfe Operadora hasta finalizar los estudios de los Planes Sectoriales de Transporte de Mercancías por Ferrocarril y de Transporte Intermodal que elabora el Ministerio de Fomento.

• Se exija a ADIF una actitud radicalmente diferente, y no meramente recaudatoria, promoviendo el crecimiento y futuro del transporte de mercancías por ferrocarril.

• Se designe por parte del Ministerio de Fomento un alto responsable como promotor del transporte de mercancías por ferrocarril.

• Se articulen, en definitiva, medidas que promuevan el transporte eficaz de mercancías por ferrocarril y la mejora de los servicios logísticos, lo cual redundará en beneficio de nuestro sector exterior, de la competitividad de las empresas usuarias y operadoras, y del ciudadano.