La barrera ocupacional: una realidad del siglo XXI
“Mujer tenía que ser”: una frase de lo más recurrida al volante. Ciertamente, las estadísticas indican que las empresas de transportes prefieren contratar hombres, no sea que eso de que las mujeres conducen mal sea verdad y les siniestren los autobuses día sí y día también. Una de las equivocadas creencias que mantienen erguido un muro muchas veces infranqueable para ellas.
Basándonos en los datos del INE del último trimestre de 2014 corroboramos la existencia de una alarmante brecha ocupacional entre hombres y mujeres. Una brecha que erróneamente creíamos erradicada, o al menos minimizada.
Según los datos, el único sector donde la mujer ha conseguido abrirse paso y ser valorada es en las ocupaciones intelectuales y científicas. De hecho, en este segmento de población, que a su vez se relaciona con estudios superiores, las mujeres tienen presencia en un 55%, frente al 45% de los hombres. Pero, por desgracia no es oro todo lo que reluce. Fijémonos en el siguiente nivel, que son los cargos directivos. De repente, los porcentajes dan un cambio radical. Cuando se trata de ascensos, es decir, cuando se podría tratar de que los trabajadores que desarrollan trabajos intelectuales suban un peldaño más en sus carreras, los hombres ganan ventaja. Y no poca. 70% de directivos frente al 30% de directivas.
Solo ellos pueden conducir: el 95% de hombres se encargan de transportes y operadores de maquinaria. El 80% de las mujeres no cualificadas prefieren dedicarse al sector servicios y al cuidado de personas Twittear
Es más, el porcentaje de las mujeres con estudios superiores es mayor al de los hombres, situándose en un 46% frente al 41% de ellos. Esto explica su presencia en ocupaciones intelectuales, pero por desgracia remarca mucho más la brecha en cuanto a cargos directivos. Las mujeres se quedan en el peldaño inferior (con sus hijos). Este cambio nos indica que estamos todavía muy lejos de la igualdad.
Brecha ocupacional. Fuente: elaboración propia (datos INE 2014)
A medida que el nivel de estudios va bajando, la brecha se hace más evidente y divide a la población por sexo y ocupación de una forma bastante, yo diría, Escandalosa. Los empleados de oficina son poco más de un 30%. Ellas, casi un 70%. En cambio, solo ellos pueden conducir: 95% de hombres encargados de transportes y operadores de maquinaria. El 80% de las mujeres no cualificadas prefieren dedicarse al sector servicios y al cuidado de personas, que se les da mejor.
Por último destaca también un sector demasiado sexualizado: el de la construcción. En él, casi el 95% son hombres. Parece que las mujeres son demasiado torpes. No hay otra explicación, ¿no?
Desgraciadamente, hay pocos avances en materia de igualdad. Se arrastra todavía esa cultura machista de siglos pasados, esas estructuras basadas en una sociedad patriarcal y a veces muy paternalista con el sexo femenino y por consecuencia se sigue bloqueando a las mujeres su acceso al mercado laboral y a la igualdad de oportunidades.
#díaInternacionaldelaMujerTrabajadora