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El aumento de la prima de riesgo en España impide la creación de 160.000 empleos

06/09/2011

6 de septiembre de 2011

Para la economía interna de España, el aumento de la prima de riesgo o de sobre coste de financiación tiene importantes consecuencias, enumeradas por el Grupo Affirma en un informe.

Por un lado, según cálculos del presidente de BBVA Francisco González, este encarecimiento de la financiación del Estado supone un coste extra para España de 12.400 millones de euros anuales por cada 100 puntos básicos que sube la prima de riesgo, cantidad que permitiría financiar con creces las inversiones en infraestructuras previstas para 2011.

Por otro lado, los bancos nacionales cuando acuden al mercado interbancario para financiarse pagan más o menos en función de si la prima de riesgo es alta o baja. Si a los bancos les cuesta más dinero captar fondos incrementarán los tipos de interés que les cobran a sus clientes por los créditos. En consecuencia, si los préstamos son más caros, hay menos dinero para las familias y las empresas, con lo que gastan menos y dificultan la recuperación económica.
Por último, si se crece menos, se generan menos puestos de trabajo y menos ingresos por impuestos tendrá el Estado y por el contrario mayores gastos por desempleo. Con menores fondos al Estado le resultará más difícil reducir el déficit y pagar sus obligaciones al finalizar los plazos.

Las cifras, como conclusión son claras, se estima que el aumento de la prima de riesgo en nuestro país impide la creación de 160.000 empleos y es la causante de que los costes de financiación de las nuevas operaciones de crédito de los hogares hayan aumentado en los últimos meses en torno a los 31 puntos básicos en los préstamos para la adquisición de vivienda y en 9 puntos básicos en los destinados al consumo y otros fines.

Desde el Grupo Affirma, se sugiere a las empresas seguir con atención la evolución de este dato macroeconómico con el fin de estar preparados para afrontar las consecuencias que acarrea, para la economía y a cada uno de los negocios, una elevada prima de riesgo, evitando también caer en pánico y en el círculo de desconfianza que genera la especulación, creando turbulencias en la bolsa y ambientes de desconfianza que finalmente impiden el crecimiento económico español.