Identiplast pone de manifiesto la complejidad del tratamiento de los residuos plásticos

Karolina Fras, de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea abrió el congreso señalando los principales mensajes de las políticas de residuos de Europa: minimizar los efectos sobe el medio ambiente, prevención en la generación de residuos, la creación de una jerarquía de cinco etapas en el tratamiento de residuos, un enfoque hacia los residuos como un recurso de valor y que debe ser abordado en todo su ciclo de vida. Señaló también el nuevo objetivo para reutilización y reciclado para 2020: el 50% en peso de al menos papel, metal, plásticos y vidrio de uso doméstico y otros posibles orígenes siempre que sean similares al origen doméstico. Y el 70% en peso de residuos no peligrosos de construcción y demolición.

La Directiva Marco de Residuos fue publicada el 22 de noviembre de 2008 y entró en vigor el 12 de diciembre de 2008. La fecha límite para la transposición a los estados miembro es el 16 de diciembre de 2010. La Directiva 2006/12/EC sigue siendo vinculante, al igual que las Directivas 75/439/EEC de residuos de aceites y la 91/689/EC de residuos peligrosos.

Las cinco etapas en el tratamiento de los residuos plásticos son las siguientes: prevención, reutilización, reciclaje, recuperación energética y eliminación en vertedero. La principal novedad que incluye esta normativa es considerar la recuperación energética como una opción más dentro del ámbito del reciclaje.

¿Cómo recuperar más residuos plásticos?

• Explotando aquellas corrientes de residuos que permiten un fácil reciclado.

• Aplicando nuevas tecnologías de reciclaje para aquellas corrientes en las que el reciclado mecánico no sea ni técnica ni económicamente viable.

• Desarrollando nuevos mercados para los productos reciclados.

• Aprovechando la energía que contienen los plásticos, teniendo en cuenta que una única solución no puede responder del mismo modo a diferentes situaciones.

El congreso sirvió también para poner sobre la mesa algunas dudas todavía no suficientemente claras. Por ejemplo, Ulrich Schlotter, de Tecpol GmbH, se refirió al Reach. Afirmó que el reciclado es hoy en día una necesidad, una obligación en los países de Europa. “Si el Reach dificulta el reciclado o lo imposibilita, no sé qué vamos a hacer”. En relación al Reach y al reciclado, afirmó que existen muchas lagunas. Por ejemplo, piensa que es necesario dejar claro qué significa recuperación y reciclado. También hay que preguntarse, dijo, si un producto reciclado es una sustancia y cómo se deben describir las impurezas. Previamente, Otto Linher, de la Comisión Europea, señaló que los residuos no son una sustancia referenciada por el Reach, pero esto no significa que no estén afectados por esta normativa. Otras preguntas: ¿cuál es la información necesaria según el articulo 2 Nº 7 d)? ¿Cuáles son las obligaciones para identificar impurezas? ¿Cuáles son las medidas adecuadas para gestionar las medidas de gestión?

También Peter Sundt, de EPRO (European Association o Plastics Recycling and Recovery Organisations), una organización de la que Cicloplast es miembro, puso de manifiesto las numerosas dudas que todavía surgen en torno a las normativas que afectan al reciclado: ¿qué es exactamente residuo doméstico? ¿cómo se suman las cantidades de reutilización y reciclado? ¿son los objetivos generales o para cada material? “Hasta 2020 el incremento del residuo doméstico podría alcanzar el 25% -afirmó-. Los plásticos tendrán más participación en el sector de envases y en otros productos, por ejemplo en construcción, y por lo tanto tendrán un mayor protagonismo en el futuro, precisamente porque es un material de futuro. Por nuestra parte, como industria, podemos ayudar a definir los objetivos y a desarrollar más proyectos de reciclado”.

Identiplast también sirvió para tratar temas sobre los que se está hablando en la actualidad. Mariagiovanna Vetere, de Corepla, habló de la importancia de reciclar mezclas de plásticos, una actividad en la que entre otros países, España también está involucrada mediante el sistema de recogida de plásticos promovido por Cicloplast. Reciclar mezclas de plástico significa afrontar unos residuos que contienen diversos tipos de plástico. Se puede crear valor de plásticos mezclados de tres formas: dando más importancia a la fase de clasificación; obteniendo material reciclado de alto valor mediante la separación de polímeros (PP, PET, PS...) y utilizando la fracción de los plátios mezclados tal cual, sin separar, localizando aplicaciones finales como asfalto modificado.

Paul Augustowski, CEO de BasellOrlen Polyolefins, hizo referencia a los efectos positivos que los plásticos ejercen sobre el consumo energético. Se preguntó, por ejemplo, cómo pensamos proporcionar energía a una población mundial que pasará de los actuales 6.500 millones de personas a 9.000 ó 11.000 millones en 2050. Los plásticos contribuyen al ahorro energético y a la protección del clima: mejoran la eficiencia energética de los edificios, permiten la fabricación de medios de transporte más ligeros, hacen posibles las energías renovables y aportan eficiencia a los recursos. Además juegan un papel fundamental en la producción, distribución y almacenamiento de alimentos. Esta defensa de los plásticos sirvió como base para plantear sus opiniones con respecto a la revisión de la Directiva Marco de Residuos. Destacó tres elementos clave en la revisión, que mejoran la eficiencia de los recursos: jerarquía de cinco pasos, reconocimiento de la recuperación energética como método de recuperación y amplia definición de los objetivos de reciclado demandados.

La exploración de nuevas tecnologías para residuos difíciles de reciclar en la forma tradicional, y el encontrar la forma de reciclar una mayor parte de los residuos domésticos, son para él formas para aumentar el reciclado. Y afirmó: “Tenemos que dejar de desechar una fuente de energía cuando nos falta tanta energía”. La nueva directiva marco estimulará a los estados miembro para explorar la recuperación y reducir los residuos enviados al vertedero. Porque lo que está claro es que el reciclado por sí solo no basta.

En este sentido, en lo que se refiere a España, la recuperación energética es una de las opciones del reciclado de los residuos plásticos con mayor potencial de desarrollo. Según se observa en el gráfico con datos de “vertedero, reciclado, recuperación energética”, países como Alemania, Suiza o Dinamarca consiguen recuperar la práctica totalidad de los residuos plásticos. Parece demostrado que la recuperación energética tiene un papel esencial para poder alcanzar esta cifra.

Un buen ejemplo de ello son los combustibles SRF (Solid Recovered Fuel -combustibles sólidos obtenidos a partir de residuos no peligrosos) que cumplen con los requisitos de clasificación y especificaciones de la norma prCEN15359. La producción de SRF en Europa supera los 8 millones de toneladas, y se comercializan en forma de copos o pellets. Sus principales aplicaciones son, cementeras, plantas eléctricas, plantas CHP, y altos hornos.

En lo que coincidieron diversos ponentes en Identiplast es en que la revisión de la Directiva Marco abre nuevas oportunidades a la industria del plástico: más competitividad para los plásticos, nuevas oportunidades de negocio en reciclado mecánico y químico y una mejor percepción por parte de la sociedad.

Una tonelada de botellas ahorra hasta 1,5 toneladas de dióxido de carbono

Chris Dow, director general de Closed Loop Recycling (Reino Unido), aportó cifras sobre la recogida de botellas en el Reino Unido y dio datos interesantes. Por ejemplo: una tonelada de botellas ahorra hasta 1,5 toneladas de dióxido de carbono. La planta de Dagenham de Closed Loop es equivalente a suprimir 13.000 coches de la carretera. Utilizan un sistema con fases como lavado en seco, separación óptica, separación manual, granulado, lavado, separación de copos y descontaminación.

Como retos para el reciclado de botellas señaló el reciclado de botellas de PVC, de etiquetas diversas, adhesivos y tintas, siliconas transparentes, componentes metálicos, envases de HDPE para detergentes y botellas de tamaño pequeño.

Orsolya Csorba, de la Dirección General de la CE, aportó datos interesantes sobre este tipo de residuos. Cada año llegan al mercado 10,3 toneladas de equipos y electrónicos en la Europa de los 27. En este entorno se generan al año 9 millones de toneladas de residuos eléctricos y electrónicos y se prevé que la cifra ascienda a 12,3 millones en 2020. En definitiva, 24 kg de residuos eléctricos y electrónicos por habitante europeo y año. El 90% de este inmenso flujo de residuos se venía depositando en vertedero, incinerando o recuperando sin pretratamiento. La directiva WEEE (Waste Electric Electronic Equipment) se ha pensado para resolver este problema. Se ha puesto como objetivo recuperar y reciclar 4 kg por persona al año.

Los principales problemas son la falta de residuos (el 54% de los residuos se dirigen a tratamientos no estándar en la UE y los envíos ilegales fuera de la UE), las cargas administrativas (se requieren registros e informes de productores) y la falta de claridad en el enfoque y las definiciones. La Directiva WEEE se propone solventarlos: quiere que se recoja el 65% del peso de los residuos de equipos eléctricos y electrónicos del mercado de los estados de la UE.

Desde otro punto de vista, el reciclado de estos residuos es también una oportunidad de negocio. El reciclado crea de 5 a 7 veces más empleos que la incineración y 10 veces más de empleos que el vertido en vertederos. El valor del material recuperado puede alcanzar los 2.000 millones de euros al año.

Jöran Reske, vicepresidente de la asociación European Bioplastics fue el encargado de abrir las sesiones sobre los bioplásticos, materiales sobre los cuales se está hablando mucho en los últimos tiempos y que tienen su influencia en la recuperación. Los biopolímeros pueden ser de dos tipos: bien plásticos fabricados a partir de recursos renovables (biomasa), o bien plásticos que son biodegradables en unas condiciones determinadas.

Los bioplásticos están mostrando un incremento de más del 20% anual. En 2007 se consumieron 70.000 toneladas. Sus aplicaciones más importantes están en el envasado de alimentos, bolsas de compra, productos de catering, plásticos acolchados para agricultura, entre otros.

Los bioplásticos deben ser compostables o deben estar hechos a partir de recursos renovables. La compostabilidad es un pilar básico para European Bioplastics. Tras las pruebas pertinentes, una certificación proporcionada por terceros otorga una marca de calidad al producto y en países como Reino Unido, Holanda y otros ya existe un logotipo que los identifica.

Otro enfoque interesante es el envasado de comida en un envase orgánico. Una ventaja es que, en el caso de frutas y verduras, el envase puede desecharse junto con las peladuras para la recuperación orgánica. Además, los productos que ya no se pueden vender se pueden tirar directamente con el envase.

En general, los bioplásticos pueden ser recuperados de todas las formas posibles.

La recuperación biológica de bioplásticos incluye el compostaje y la digestión anaeróbica (AD). Por ejemplo en cafeterías o eventos festivos, los bioplásticos pueden ser procesados conjuntamente con la comida. Los envases pequeños no son un problema si se compostan y la comida caducada no tiene que ser separada del envase.

La primera prioridad es limitar el impacto negativo de los nuevos materiales en los sistemas de reciclado ya instaurados. Según J. Reske, esto no debería ser un problema debido a los pequeños volúmenes. Además, el reciclado de algunos bioplásticos parece prometedor, por lo que debería continuar siendo desarrollado.

Los diversos ponentes en las sesiones dedicadas a los biopolímeros hicieron especial hincapié en dejar claro que los bioplásticos, por sí mismos, no son una solución al abandono indiscriminado de residuos ya que para poder evitarlo es necesaria una adecuada concienciación ciudadana, una legislación adecuada y una gestión de residuos apropiada.

En este contexto, Francisco Cimadevila, director general de PlasticsEurope Ibérica señaló a Plásticos Universales que el de los biopolímeros “es un tema que requiere muchos matices. La entrada masiva de biopolímeros en la actual cadena de reciclado contaminaría el material. No pueden arrojarse biopolímeros a los residuos de plásticos convencionales. Y la biodegradabilidad no resuelve el problema del gran volumen de plásticos desechados a diario por consumidores e industria”.

Conclusiones de Identiplast 2009

Podemos resumir las conclusiones de Identiplast 2009 en los siguientes puntos:

• Los residuos plásticos son valiosos y por eso son parte de la solución a la escasez de recursos.

• Existen muchas opciones a la hora de gestionar los residuos plásticos.

• Los bioplásticos, por sí solos, no son una solución al “littering”.

• Los SRF son necesarios para una gestión adecuada de los residuos y cumplir con la demanda de energía sostenible, minimizando la cantidad de residuos que van a vertedero.

• Existen actividades y experiencias positivas en algunos países que pueden ser adoptadas por otros.

Mark Kenrick, business director de la división PET & PTA de Artenius (Artenius/La Seda de Barcelona) afirmó que la industria del PET siempre se ha tomado muy en serio el seguimiento de sus productos. Esta industria se siente bien posicionada para dar el paso de liderar el reciclaje destinado a obtener productos que puedan estar en contacto con alimentos. La normativa establece una serie de normas para los plásticos reciclados en contacto con alimentos: sólo se permite reciclado mecánico y sólo de plásticos que, cuando eran vírgenes, ya habían sido homologados para estar en contacto con alimentos.

Roberto Bertaggia, presidente de Petcore, señaló que “la historia del reciclado de PET es una historia de éxito. Los índices de recogida de PET en 2007 ascendieron al 41% en Europa, aunque el ritmo del crecimiento bajará, según sus estimaciones y se situará en el 44% en 2010. Este objetivo se puede realmente lograr, teniendo en cuenta los cambios económicos y sabiendo que los argumentos utilizados hasta hace poco han variado totalmente. En este sentido, hay varios temas a tener en cuenta:

En primer lugar, las exportaciones de balas de botellas de PET a mercados volátiles como China. Este país ha cerrado este mercado. En 2007 se exportaron a China cerca de 176.000 toneladas de balas de botellas de PET, pero este mercado cambió en el último cuarto de 2008 como consecuencia del menor precio del petróleo, del precio del PET virgen y de la demanda de exportaciones de bienes de consumo. Esta situación ha afectado al precio del PET reciclado y pone sobre la mesa la pregunta de si Europa tiene suficientes instalaciones para hacer frente a este reciclado. Dado que esto no es así, la continuidad de la situación podría desembocar en montañas de botellas de PET en balas.

En segundo lugar, continuó Roberto Bertaggia, está la caída de la rentabilidad de la cadena de reciclado. El precio del PET reciclado está relacionado con el del PET virgen. De mediados de 2005 a final de 2008 el ratio PET reciclado/PET virgen era del 62%. Los márgenes para los recicladores han caído de 220 euros por tonelada a 150 euros por tonelada, lo que significa una caída del 30%. También tienen problemas las empresas de recogida, hasta el punto que la recogida puede no ser económicamente factible. Los sectores de mayor crecimiento y los más sostenibles para el PET reciclado son las aplicaciones de películas y envases en contacto con alimentos. Exigen nuevas fases a la cadena del reciclado para permitirles ofrecer grados que puedan estar en contacto con alimentos a sus clientes. El problema es que estas fases son caras.

Roberto Bertaggia recomendó incrementar el coste de la recogida y el reciclado, estudiar una logística del reciclado más efectiva, informar y orientar a los legisladores para lograr esquemas de recogida adecuados.

Otro aspecto a tener en cuenta es legislación relativa al reciclado. El 80% de los países europeos mostraron en 2007 un porcentaje de reciclado de PET superior al marcado por la Directiva (2004/12/EC), que establecía un reciclado de plásticos en 2008 del 22,5%.

Por último, el presidente de Petcore se refirió al PLA. Planteó el problema de cómo, incluso cantidades pequeñas de PLA, afectan gravemente al reciclado de PET si todos estos envases se mezclan. En su opinión, el PLA es una verdadera amenaza para la industria del reciclado de PET en Europa, que ya está muy establecida y desarrollada. Todo esto podría impedir a un país alcanzar los objetivos marcados por la Directiva. “Es por esto –explicó- que recomendamos con firmeza que la industria del PLA establezca un sistema separado para reciclar PLA”.

Reciclado de películas multicapa

Identiplast es también un foro donde se presentan ejemplos interesantes de procesos de reciclado especiales, o fórmulas de éxito de determinados países. Entre las numerosas ponencias destacó la de Hiroe Iguchi, directora de Ventas de la empresa japonesa Far East Network, que expuso su experiencia en el reciclado de películas multicapa. Según explicó, la mayor parte de los materiales compuestos se incineran o depositan en vertedero sin reciclado, “por lo que nosotros hemos desarrollado un sistema para reciclarlos”. Los films multicapa para envasado de alimentos son laminados y tienen normalmente una barrera. Para solventar esta dificultad Far East Network ha creado una empresa que recicla este tipo de películas basándose en tres puntos importantes: uso de aditivos compatibilizadores para mezclar diferentes aditivos, máquinas ajustadas a cliente y dedicadas solo al reciclado de films multicapa (eliminan tintas y adhesivos del compuesto y mezclan diferentes plásticos) y tecnología de compounding para producir pellets de alta calidad.

Las aplicaciones del pellet reciclado pueden estar en piezas interiores de automóvil, grandes contenedores de agua, materiales de construcción o tableros de madera.