El termoconformado ayuda a decorar en la construcción
El grupo alicantino Valero ha realizado una inversión que incluye una termoconformadora de la serie Powerform de Cannon Shelley, modelo PF4215. Esta instalación procesará poliestireno de alto impacto y ABS, en grosores de hasta 6 mm y en formatos de placa de 4,25 a 1,5 m, con una altura de producto de 600 mm. La intención es la de fabricar moldes para cornisas y elementos decorativos de fachadas de hasta 4,2 m de longitud. Una de las grandes ventajas de este sistema es que permite el vertido in situ del hormigón en los moldes y, en definitiva, la propia elaboración de las molduras o cornisas a pie de obra.
La línea está configurada de forma que la alimentación, totalmente automática, del material proviene de bobina. Incorpora además un dispositivo de corte por guillotina para los casos en los que se trabaja a partir de bobina, con láminas de hasta 2 mm de espesor. Si el espesor de las placas o láminas es de hasta 6 mm, existe también en la instalación un cargador automático de las placas o láminas que trabaja directamente desde los palets cargados previamente.
El material se mueve en la máquina de tres estaciones mediante una cadena especial doble y en paralelo, que incorpora su propio motor, con el fin de que los productos puedan ser descargados inmediatamente después de su termoconformado.
Las máquina de tres estaciones está controlada por el microprocesador de Cannon Shelley PTC T2000, que ofrece la gestión completa de los sistemas de secuencias y calefactores. Asimismo, el citado control proporciona un diagnóstico completo de errores y un almacenaje adecuado de los datos del proceso.