Kutxa ha decidido recuperar una práctica que había abandonado hace muchos años: apoyar al tejido productivo de Gipuzkoa entrando a formar parte del accionariado de empresas punteras o estratégicas. La primera operación ha sido la entrada en el capital de la compañía elgoibartarra de máquina-herramienta
Etxe-Tar, de la que ha tomado una participación no hecha pública pero que fuentes próximas al proceso sitúan en torno al 30%. En realidad, la toma de capital se ha producido en Inversiones Zubiatzu, la sociedad holding de la que dependen Etxe-Tar y Albicein, también de Elgoibar.
La entrada en el capital ha coincidido con un proceso de reordenación del accionariado de la compañía. Etxe-Tar es una empresa fundada hace más de 50 años por una docena de socios. Las sucesivas herencias y traspasos accionariales a las nuevas generaciones había hecho que el capital estuviera repartido entre más de 60 personas herederas de los socios fundadores.