Un proyecto de investigación de la UE desarrolla una nueva herramienta para el diagnóstico de la malaria
2 de septiembre de 2013
El proyecto de investigación Nanoma, financiado por la UE, ha comenzado a ensayar, un año antes de lo previsto, una herramienta nueva y pionera de diagnóstico de la malaria. El dispositivo, similar a un teléfono inteligente, usa la nanotecnología avanzada para detectar no sólo la infección, sino la resistencia a los fármacos, sólo con una gota de sangre y en quince minutos. Según los participantes en el proyecto, si los ensayos sobre el terreno que se harán este año dan resultados positivos, el dispositivo se podría utilizar en los países en desarrollo a partir de 2015.
La comisaria de Investigación, Innovación y Ciencia, Máire Geoghegan-Quinn, ha declarado: “La mitad de la población mundial está expuesta a la malaria. Para afrontarla, el diagnóstico rápido y preciso es tan importante como los nuevos medicamentos, las vacunas y los métodos para impedir su propagación. Por eso la UE ha invertido desde 2002 más de 209 millones de euros en la investigación sobre esta enfermedad ”.
El proyecto Nanomal tiene un presupuesto de 5,2 millones de euros. Está dirigido por la Universidad St. George de Londres, que trabaja en colaboración con el grupo británico QuantuMDx, especializado en diagnóstico con dispositivos portátiles y en secuenciación de ADN, y con equipos de investigadores de la Universidad de Tubinga (Alemania) y del Instituto Karolinska de Estocolmo (Suecia). Se quiere conseguir que el dispositivo dé los resultados con la misma calidad que el laboratorio pero con menos coste y en menos tiempo. Esto lo hará ideal para el uso sobre el terreno y permitirá a los médicos recetar combinaciones personalizadas de medicamentos contra la malaria.
El proyecto cuenta con una financiación de 4 millones de euros del Séptimo Programa Marco de Investigación de la UE. Se puso en marcha para responder a las señales crecientes de que el parásito de la malaria está mutando y se está haciendo resistente a las terapias más eficaces, basadas en combinaciones de fármacos con artemisinina.