Mycsa afianza su relación con la biomasa

Por su conocimiento de estas actividades y por la capacidad de Mycsa en convertirse en un proveedor global, la compañía ha ampliado su campo de acción a tres sectores muy relacionados: la manipulación de la madera, el tratamiento con astillado o trituración y su aprovechamiento energético en producción de agua caliente o vapor de agua.

Al igual que no toda la biomasa tiene las mismas características de dureza, humedad, composición, etc., tampoco toda la maquinaria es la adecuada para trabajar con la biomasa. Por ello Mycsa, conocedora de este hecho, posee una amplia gama de maquinaria específica para el tratamiento y procesado de cada tipo de biomasa, cumpliendo en todos los casos las normas europeas de astillado y sus clases, por ejemplo consiguiendo las “mejores” calidades de astilla como la clase G30 definida en la norma austriaca ÖNORM7133, o máquinas certificadas capaces de erradicar plagas según la Orden de 22 de diciembre de 2009 de la Conselleria de Agricultura, Pesca y Alimentación de la Generalitat Valenciana, en donde nuestro equipo Astilladora Eschlböeck Biber 92 RBZ, está certificado por la Generalitat Valenciana para el cumplimiento de los requisitos como método de eliminación de las palmeras afectadas por la plaga Rhynchophorus ferrugineus.

La gama es amplía para llegar a todas las necesidades, equipos como astilladoras, trituradoras, cribas, volteadoras, grúas forestales, manipuladoras, etc. de fabricantes austriacos y alemanes referentes en el mercado como Eschlböck, Neuson, Sennebogen, Albach, Arjes, Palfinger, etc.

Para clientes que necesitan tratar madera pero son empresas pequeñas y medianas que no disponen de suficiente volumen de madera para tratar, Mycsa les ofrece un servicio de alquiler con operador de estos equipos. Mycsa cuenta con un departamento, específicamente en la delegación en Huelva, que ofrece estos servicios de astillado y procesado. Con un parque de más de 20 máquinas pone a disposición del cliente personal formado y especializado en astillado y triturado. De este modo queda garantizado un perfecto asesoramiento que proporciona, con la máxima seguridad y al mejor precio, el mejor servicio.

Máquinas de astillar y triturar que forman unos conjuntos carrozados en vehículos que han sido innovadores en el mercado nacional, y que han convertido a Mycsa en la primera empresa española de alquiler de este tipo de equipos. Clasificación dada por EQA Certificados I más D más i, en donde certifican nuestros equipos como Innovación Tecnológica con el proyecto: ‘Diseño y desarrollo de un nuevo sistema de recogida y procesado de biomasa forestal’.

Aprovechando los conocimientos en la transformación de la biomasa a astilla, Mycsa opera como ESE (Empresa de Servicios Energéticos) ofreciendo una solución a medida a clientes con gran consumo de agua caliente o vapor de agua.

Sin inversión inicial alguna, Mycsa pone todos los medios necesarios para satisfacer la demanda energética de instalaciones industriales y residenciales, ofreciendo ahorro desde el principio. Avalado por la firma de calderas austriacas Herz para generar agua caliente y el distribuidor L. Solé para vapor de agua, Mycsa exige en todas y cada una de sus instalaciones, la máxima fiabilidad y calidad. Para ello colabora con los servicios oficiales e ingenierías propios de los proveedores de calderas y realiza constantes controles de calidad de la astilla, cumpliendo, incluso, con la estricta normativa austriaca ÖNORM7133.

Nuestro campo de acción como empresa de servicios energéticos, incluye:

1.- Desarrollo, diseño y financiación del proyecto de ahorro o sustitución de energía térmica para calefacción, ACS y vapor mediante calderas de biomasa

2.- Montaje de la caldera e instalación de la red primaria

3.- Gestión de ayudas públicas y subvenciones

4.- Mantenimiento de la instalación según RITE

5.- Suministro de Astilla (maquinaria y transporte) y control del Almacenaje

Las ventajas de aplicar esta tecnología abarcan tanto a las propias empresas u organismos que realizan su implantación en sus instalaciones como a las comarcas donde se instalan las calderas: emisión “neutra” de CO₂, siendo una solución respetuosa con el medio ambiente, suministro de materia prima local que genera por ello puestos de trabajo, revaloriza y limpia los montes y por ello, menor riesgo de incendios, y rentabiliza los cultivos energéticos locales.