¿Por qué sustituir la tierra?

La tierra de cultivo de las plantas de interior se compone de varios elementos escogidos (en el mejor de los casos) por su riqueza en materia orgánica, su capacidad de retener el agua de riego y liberarla posteriormente y de fijar los nutrientes aportados con los fertilizantes y tenerlos a disposición de las raíces cuando la planta los necesita.

Este medio de cultivo no es inerte y contiene, en mayor o menor medida, gérmenes, bacterias y huevos o larvas de insectos, ácaros, etc. Esto provoca que con la humedad del riego pueda producirse la formación de mosquitos, ácaros, hormigas, etc., que luego se ven revolotear por las pantallas de ordenadores, ventanas y demás fuentes de luz.

El sistema Hidroponic, utiliza un sustrato totalmente inerte y limpio, a la vez que hostil a la implantación de cualquier actividad biológica, ya que el agua permanece al fondo del recipiente - inaccesible a mosquitos, moscas, etc. - y la superficie permanece siempre seca y limpia.

Asimismo, el sistema es altamente eficaz en el aprovechamiento del agua de riego, ya que ésta permanece en contacto con las raíces y a disposición de la planta hasta la última gota, sin ningún desperdicio por drenaje ni evaporación por capilaridad.

La alta permeabilidad del sustrato utilizado (arcilla expandida) al intercambio de gases atmosféricos, potencia enormemente las ventajas de depuración del aire. La extrema sencillez de mantenimiento evita los errores de riego y fertilización, alargando la vida de sus plantas con el mínimo esfuerzo y dedicación.

¿Qué sucede con la tierra en las jardineras? ¡Rápidamente se degrada!

Física y biológicamente Químicamente

· Destrucción de la estructura Desequilibrio químico

· Compactación Pérdida de elementos nutritivos

· Asfixia radicular (flata de oxígeno, putrefacción...) Acumulación de sales

· Destrucción de su bioactividad (la tierra se muere) Elevación del Ph

Consecuencias visibles

Tierra contraída, blanquecina, enmohecida..., carencias (hojas amarillas, con manchas y zonas secas), falta de belleza y aspecto poco saludable, muerte lenta, pérdidas económicas...

Posibilidades

· Cambiar regularmente la tierra (Solución provisional, sucia, incómoda y costosa.

· Sustituirla por un material inalterable (Solución definitiva, límpia, cómoda y rentable).