Un 'pack de ahorro energético' para gestores y propietarios de edificios públicos

El centro de investigación CIRCE ha finalizado recientemente los trabajos del Proyecto europeo TRIBE, una iniciativa que ha perseguido mejorar la eficiencia energética de los edificios públicos mediante un cambio en el comportamiento energético de sus usuarios. Estos edificios presentan unas características únicas, ya que en ellos dichos usuarios (habituales y ocasionales) no son los responsables de hacer frente a las facturas energéticas, y en muchos casos no hacen un uso apropiado de los recursos. Esto implica un enorme potencial de ahorro y una oportunidad excelente para continuar la descarbonización del sector de la edificación.

Bajo el paraguas del proyecto TRIBE, siete socios de Turquía, Suecia, Francia, Austria y España han unido sus esfuerzos para desarrollar una serie de herramientas que ayuden a los propietarios y gestores de estos edificios a optimizar sus consumos de energía. Las herramientas se han puesto a prueba con éxito en cinco pilotos de distinta tipología y perfil de usuarios: dos edificios de oficinas, un instituto de educación secundaria, un edificio de enseñanza universitaria y un edificio de viviendas sociales.

El proyecto, financiado en el programa H2020 de la Comisión Europea, ha estado coordinado desde España por CIRCE, y ha contado con la colaboración de Zaragoza Vivienda y Acciona Infraestructuras. Además, también ha tomado parte el IES Azucarera de Zaragoza, que ha proporcionado uno de sus edificios como piloto.

Entre los resultados que se han conseguido se encuentran varias herramientas para promover la eficiencia energética, destacando un videojuego de eficiencia energética en forma de app (Tribe2020), una guía de 250 medidas de eficiencia energética y un paquete de actuaciones (TRIBE Pack) para que las autoridades públicas puedan aplicar de forma sencilla en sus edificios.

El TRIBE pack consiste en una serie de herramientas que pueden ser usadas por gestores y propietarios de edificios públicos para reducir sus consumos e involucrar a sus usuarios hacia actitudes de eficiencia energética, mediante la implementación de las soluciones alcanzadas por el proyecto. Este pack comprende 5 componentes que pueden ser implantados individualmente, o en conjunto, donde tienen mayor potencial.

Esta fase tiene como objetivo analizar el uso de la energía, calcular el potencial de ahorro energético y definir propuestas de mejora. Además, informará sobre el impacto de las medidas propuestas en las emisiones de CO₂.

La aplicación de esta fase en los edificios pilotos del proyecto ya arrojó resultados interesantes, identificando puntos de ineficiencia, como por ejemplo la apertura de las ventanas para reducir la temperatura cuando la calefacción se encontraba encendida, la utilización de iluminación en zonas no ocupadas, o la utilización a carga completa de la calefacción en periodos de baja ocupación. Esto permitió a los gestores de los pilotos realizar las primeras actuaciones de eficiencia energética como la calibración del punto óptimo de calefacción, la divulgación de medidas de eficiencia energética o la adaptación de los tiempos de operación a la ocupación.

La información recogida en la primera fase (auditoría), se emplea para obtener modelos energéticos precisos del edificio analizado y calcular los potenciales de ahorro energéticos en el caso de implementar medidas de eficiencia.

Con esta fase, se consigue evaluar y optimizar el rendimiento energético de un edificio mediante técnicas de simulación energética dinámica a través de motores de cálculo específicos, proporcionando consumos primarios de energía por uso y por fuente de energía, y las emisiones de CO₂ asociadas. Posteriormente el modelo es calibrado para reducir las diferencias entre los consumos simulados y los reales y se hace una primera selección de acciones para mejorar la eficiencia energética de entre las 250 medidas recogidas por TRIBE, recopiladas en una guía. Con esto se puede ver la idoneidad de las acciones más favorables para cada tipo de edificio, proporcionando información sobre el ahorro de energía, económicos y periodo de retorno. Durante el proyecto, por cada medida se ha desarrollado una metodología específica que ha permitido calcular el potencial de ahorro energético en los 5 edificios pilotos y en otros 3 edificios representativos de los sectores residencial, académico y de oficinas.

La guía de 250 medidas se ha elaborado y clasificado en función de la tipología de edificio al que aplican, del tipo de elemento sobre el que actúan (elemento constructivo, instalaciones o comportamiento de usuario), si requieren o no inversión, y en caso afirmativo, la inversión necesaria y su periodo de retorno, para facilitar su manejo. La guía se encuentra disponible en la web del proyecto http://tribe-h2020.eu/).

Gracias a la monitorización y al análisis de los datos, es posible detectar para cada piloto aquellos consumos inusuales de energía, así como ineficiencias en el uso de los sistemas térmicos y eléctricos. Una vez identificados, el modelo virtual ayudará a establecer medidas correctoras y optimizar el uso de estos sistemas.

En primer lugar, se hace un análisis del tipo de edificio y sus usuarios, y en función de eso se elabora un plan de actuación, que puede comprender medidas como la producción de materiales (folletos, posters, videos), la impartición de charlas o la publicación de informes, premios o concursos sobre el rendimiento energético del edificio y sus usuarios.

Además, la inversión necesaria para implementar el TRIBE Pack o sus medidas de eficiencia podría ser financiada en algún tipo de programa público, consiguiendo reducir considerablemente el retorno económico de la inversión. A esto contribuye que gran parte de las medidas de eficiencia energética previstas, al estar encaminadas a promover un cambio en la actitud, representan un coste muy bajo o incluso nulo, si bien las de mayor inversión implicarán un mayor ahorro.

El proyecto también ha estudiado y analizado las barreras de cada una de las fases del TRIBE pack para proporcionar una solución que afecte en el menor grado posible a los usuarios y al funcionamiento diario de la organización.

Otra de sus ventajas es que puede adaptarse a las necesidades de cada edificio, pudiendo realizarse de forma completa u optar por módulos concretos. La campaña de concienciación de los usuarios es la que proporciona ahorros energéticos directos, mientras que la Auditoría Energética, el Modelado Virtual y la Monitorización ICT proporcionan ahorros potenciales ya que dependen de la aplicación o no de medidas de eficiencia energética. A su vez, son fases que contribuyen de un modo decisivo a la comprensión del rendimiento y operación energética del edificio, y ayudarán a que la toma de decisiones alcance los mejores resultados. La implementación del TRIBE Pack durante el proyecto ha demostrado que, aprovechando las sinergias entre los cinco componentes, su aplicación de forma conjunta en vez que individual, permite obtener mejores resultados, ahorrando en inversión y tiempos de ejecución.