Un nuevo mercado hecho a medida
Mercabarna ya ha comprado los terrenos para ubicar en nuevo Mercat Central de la Flor. La parcela cuenta con una ubicación inmejorable: al lado de la futura ciudad aeroportuaria del Aeropuerto de Barcelona, tan solo a 13,9\1km\2 del centro de esta urbe y en medio de la zona de donde provienen la mayoría de sus clientes.
Mercabarna ya ha comprado los terrenos para ubicar en nuevo Mercat Central de la Flor. La parcela cuenta con una ubicación inmejorable: al lado de la futura ciudad aeroportuaria del Aeropuerto de Barcelona, tan solo a 13,9\1km\2 del centro de esta urbe y en medio de la zona de donde provienen la mayoría de sus clientes. Además, esta nueva situación permitirá el crecimiento del Mercado así como personalizar y adaptar las nuevas instalaciones a las necesidades de mayoristas y compradores y, de esta manera, consolidarlo como un centro privilegiado de venta de flores, plantas y complementos.
El nuevo Mercat Central de la Flor estará situado en unos terrenos que se llamarán Mercabarna aeropuerto. Se trata de una parcela de 44.100 m2 situada al lado de la ciudad aeroportuaria que está construyendo en Aeropuerto de Barcelona en el Baix Llobregat. Este nuevo centro estará muy bien situado, en medio de una zona que la Generalitat de Catalunya está potenciando para realizar un gran desarrollo, y que se conoce con el nombre de Proyecto Europorta. Además, la parcela está muy cerca de los polígonos Mas Blau, de la misma Zona Franca y a 6 km de Mercabarna.
Pero lo más importante es que su ubicación también beneficiará al Mercado desde el punto de vista comercial ya que se encuentra situado en el Baix Llobregat y muy cerca de Barcelona, una zona que es su principal ámbito de influencia, y de donde vienen la mayoría de sus clientes. Pero además, según explica el responsable del Mercat Central de la Flor de Mercabarna, Jaume Esteve, “con este nuevo centro se espera atraer a los clientes potenciales que hay en la ciudad de Barcelona, en los municipios del Baix Llobregat e, incluso, a parte de los floristas del área del Vallés, el Penedés y el Garraf, que son en total unos 750”. Y es que gracias a la buena localización de Mercabarna aeropuerto todos los municipios de esta zona gozarán de una accesibilidad más fácil y rápida que la que tenían hasta ahora para ir a Mercabarna. Así, el gerente del Gremi de Floristes de Catalunya, Lluís Vilagran, asegura que “el nuevo Mercat Central de la Flor-Mercabarna aeroport ganará muchos clientes si ofrece a los floristas aquello que necesitan: grandes zonas de aparcamiento, paradas mayoristas amplias y unos productos de calidad”.
La compra de esta parcela es la segunda mayor inversión que ha realizado Mercabarna a lo largo de su historia, después de la adquisición, ahora hace 21 años, de los terrenos de la Zona Franca donde está ubicada la Unidad Alimentaria. En la parcela, además, hay un edificio construido de casi 10.000 m2 de superficie útil, en dos plantas, con posibilidades de crecer en función de la demanda del mismo sector. “Se trata de una instalación de 3 edificios con unos interiores totalmente diáfanos que permitirán reformarlo y adaptarlo a las necesidades de los usuarios”, explica Lluís Alberich, Director de l’Àrea Industrial i de Serveis de Mercabarna. Asimismo, el espacio no construido de la parcela, de unos 35.000 m2, también se adaptará a las necesidades de los usuarios.
Un Mercado hecho a medida
El objetivo de Mercabarna es claro: “Generar unos equipamientos que permitan el desarrollo de las actividades del Mercat Central de la Flor, garantizando las mejores condiciones tanto para las personas como para el producto”, explica Alberich.
El equipo del arquitecto Willy Müller será el encargado de llevar a cabo el proyecto de remodelación, adecuación y construcción del nuevo Mercado. Será un centro moderno con la tecnología necesaria para facilitar el trabajo a los usuarios. Pero lo más importante es que estará hecho a medida. En este sentido, Jaume Esteve asegura que “la opinión y la ayuda de los mismos mayoristas será muy importante para poder diseñarlo de acuerdo con sus necesidades”.
Los casi 10.000 m2 que tendrán las nuevas instalaciones, unos 4.000 m2 más que el antiguo Mercat Central de la Flor antes del incendio de 2001, permitirán ampliar el espacio de las paradas mayoristas, que podrán contar con oficinas, cámaras de conservación, salas de manipulación para elaborar centros y ramos, y un gran espacio de exposición.
Asimismo, el proyecto, tendrá en cuenta las diferentes características y necesidades de los productos que se comercializan. Por esta razón, se prevé que tenga tres zonas diferenciadas.
Una de ellas destinada a la flor cortada, con cámaras frigoríficas para garantizar su correcta conservación. La otra parte, contaría con una zona de invernaderos para las plantas. Finalmente, el Mercado tendría una zona especialmente diseñada para acoger a las empresas que comercializan flor seca y complementos, con unos grandes espacios de exposición.
Una apuesta de futuro
“Cambiar siempre cuesta. Pero Mercabarna aeropuerto es una apuesta de futuro” afirma Jaume Esteve. Y es que desde el incendio que el 21 de abril de 2001 quemó el Mercat Central de la Flor hasta ahora, Mercabarna no ha dejado de trabajar para encontrar el mejor sitio para ubicar uno nuevo. En menos de un año, se construyó un centro de compras provisional de 3.536 m2 y se encargó un anteproyecto de construcción de unas nuevas instalaciones al arquitecto Willy Müller. Pero a lo largo de 2002, una vez valorado el anteproyecto de Willy Müller, la dirección de Mercabarna consideró que la superficie de que disponía no era suficiente para garantizar el crecimiento y la expansión del Mercado a medio y largo plazo.
Es precisamente por esta razón que se decide buscar un espacio fuera de Mercabarna.
Barcelona, Gavá, Viladecans, Sant Boi, El Prat y Cornellá son poblaciones donde durante estos años se han buscado terrenos bien situados y accesibles para ubicar el nuevo Mercado. Pero en toda esta zona, muy cercana a Barcelona cada vez escasean más las parcelas urbanizables, grandes y bien comunicadas y los precios de los terrenos son muy elevados.
Finalmente, el 1 de abril de 2005, Mercabarna adquiere una parcela muy cercana al Aeropuerto de Barcelona. “Estos terrenos sí que permitirán que, en un futuro, si es necesario, el nuevo centro pueda crecer ya que la superficie de la parcela es casi el doble que la que ocupaba el anterior Mercado”, explica Alberich.
En este sentido, desde el Gremi de Floristes de Catalunya, Lluís Vilagran considera muy positivo el traslado fuera de la Unidad Alimentaria. “De esta manera tendremos un mejor centro de compras sin límites de crecimiento y, a la vez, evitaremos que compren en él particulares como lo hacen ahora en Mercabarna”, explica.
Construimos el Mercado juntos
El 12 de abril, la dirección de Mercabarna comunicó oficialmente a los mayoristas de la flor, la intención de instalar el nuevo centro en los terrenos de Mercabarna aeropuerto. “Se está iniciando una nueva etapa con un gran reto: construir el Mercado del futuro. Pero para conseguirlo hace falta la colaboración de todos: Mercabarna, mayoristas y compradores”, asegura el presidente de la Associació d’Empresaris Majoristes del Mercat Central de la Flor (AEM), Jordi Plana.
Ahora la dirección de Mercabarna y los empresarios mayoristas deberán pensar en las necesidades de los usuarios a la hora de diseñar el nuevo centro. Posteriormente, los mayoristas tendrán que decidir cuestiones relativas al funcionamiento interno como los horarios comerciales o la oferta de productos. En este sentido, Plana asegura que ahora es el momento de renovarse para hacer del Mercado un centro de compras atractivo para el detallista. ¿Cómo? “Básicamente a través de ofrecer al comprador tres cosas: comodidad, la máxima oferta y unos horarios amplios”, afirma el presidente de la AEM.
Paralelamente a este trabajo de organización interna, se inicia un período de realización y aprobación de proyectos y obras que se prevé finalizará definitivamente en octubre de 2006 con la inauguración del Mercat Central de la Flor-Mercabarna aeropuerto.
