De la domesticación a las plantas transgénicas
Ponencia realizada por Juan Ramón Medina, Doctor en Genética y Rector de la Universidad Politécnica de Cartagena.
Unos tres siglos antes de nuestra era, se comprendió que la nota distintiva de los seres vivos es que son organismos, es decir, objetos complejos que tienden a resistir la tendencia universal a la desorganización.
Unos tres siglos antes de nuestra era, se comprendió que la nota distintiva de los seres vivos es que son organismos, es decir, objetos complejos que tienden a resistir la tendencia universal a la desorganización.
Se trata de una organización dinámica que se expresa a través del desarrollo, esto es, del crecimiento con morfogénesis y diferenciación.
La ubicuidad del desarrollo ratificó que las plantas son seres vivos. Siglos más tarde se descubrió que los seres vivos poseen una estructura celular, en sí misma compleja, lo que vino a corroborar las ideas iniciales.
La Teoría Celular aportó las pruebas empíricas que faltaban para que se aceptase por todos la hipótesis de los gérmenes, según la cual cada ser vivo procede por biogénesis de otro preexistente. Puesto que cada individuo puede formar muchos otros, sirve de base a la proliferación, y puesto que los descendientes se parecen a sus progenitores, es que existe una herencia biológica.
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