Semillas de lino y zumo de tomate protegen del cáncer
6 de septiembre de 2001
Una o dos cucharadas diarias de semillas de lino ayudan a mujeres mayores a prevenir el cáncer de pecho, mientras que un vaso de zumo de tomate disminuyen el riesgo de cáncer de próstata.
Investigadores norteamericanos han comunicado en un reciente congreso de la Sociedad Americana de Química (ACS) en Chicago, que mujeres mayores que ingieren una o dos cucharadas de semillas de lino pueden protegrese mejor contra el desarrollo del cáncer de pecho, informa el periódico "Die Welt", de Hamburgo, en su página científica. La científica Joanne Slavin, de la Universidad de Minnesota, suministró a 28 monjas mayores cinco y diez gramos de semillas de lino por día y luego comparó el contenido de estrógenos y estradiol en su sangre con el de otro grupo de monjas que no tomaban estas semillas. Se encontró que estas hormonas, cuyo alto contenido se asocia con un mayor riesgo de contraer cáncer de pecho, disminuían su nivel en la sangre de las personas que habían ingerido lino.
Por otra parte, investigadores de la Universidad de Illinois (Chicago), investigaron un grupo de 32 pacientes de cáncer de próstata. A estos pacientes se les suministró diariamente una tasa de zumo de tomate y tras tan solo tres semanas se pudo constatar que determinados daños cromosómicos asociados al cáncer de próstata, habían disminuído. También había bajado la concentración de la proteína PSA en la sangre de los pacientes, indicador de presencia de tumor de próstata. Presumiblemente es el licopeno la sustancia responsable de estos cambios, debido a sus propiedades antioxidantes.
