¿Quiénes hicieron las inversiones para poscosecha de patatas en España?

Hay productores y directivos de sus organizaciones que se preguntan ¿qué ha pasado en el mercado de la patata en España? Actualmente el sector de patata en España impulsa la creación de un Foro de la Patata, cuyo objetivo es “crear sinergias para toda la cadena de suministro de esta hortaliza y consensuar propuestas que contribuyan a la sostenibilidad de la producción y del conjunto de actividades económicas vinculadas a la producción hortícola, la distribución mayorista y minorista”, tal y como se extrae del III Congreso de Patata celebrado en Sevilla. Lo que se pretende es corregir la actual situación, que no es buena, y asegurar la viabilidad del sector de la patata en España.

Cuentan que la importancia de la poscosecha para los horticultores españoles y los de tantos otros países comenzó con la patata. En nuestro caso, los supermercados en la sección de frutas y hortalizas tienen, desde hace más de 3 décadas, un compromiso con la higiene. En las fruterías, ni tendero ni clientes quieren ver la tierra y los caracoles que vienen del campo. La gente no quiere llevarse ni polvo ni bichitos a sus cocinas en los hogares o cocinas de restaurantes. Actualmente, y desde hace al menos 3 décadas, las patatas se lavan, envasan, se etiquetan, cuentan historias en sus envases y, en algunos casos, “hay marcas que saben qué decir”, además de si son para cocer o para freír.

Limpiar, lavar y envasar tiene costes. ¿Quiénes hicieron las inversiones en poscosecha de patatas en España? ¿Fueron las organizaciones de productores o los mayoristas comerciales? En el foro español de la patata celebrado en Sevilla, Javier Boceta hizo un análisis del sector de la patata en España. Actualmente hay organizaciones de productores hortícolas que se lamentan del poco conocimiento que tienen los consumidores sobre esta hortaliza.

¿Quiénes hicieron las inversiones en poscosecha de patatas en España? ¿Fueron las organizaciones de productores o los mayoristas comerciales?

Con los actuales modelos de comercialización hortofrutícola que nos hemos dado los europeos, en pocos países los consumidores de ‘patata en fresco’ diferencian a la patata ‘nueva’, de la recién recolectada; un producto fresco lleno de sabor, que minimiza los tiempos entre recolección y la disposición para el consumo; frente a la ‘patata conservada’, una hortaliza almacenada en cámaras durante largos periodos. España, como en otros países de climas con inviernos suaves, puede producir patata nueva durante todo el año.

Quizás porque hay gestores entre los productores de patatas en España que creen que es igual una variedad que otra, también hay ‘compradores de patatas’ que culturalmente, por su propia memoria histórica de consumidores tradicionales, se les tiene acostumbrados a utilizar la misma patata para cualquier uso. En este sentido, compran las de ‘siempre precio bajo’. Es decir, ¡ruina para el productor! En este Foro Español de la Patata, José Luis Gómez, del Club Ibérico de la Patata, explicó su interpretación de las ‘tendencias en el consumo de la patata’, y se preguntaba ¿cuáles son las recomendaciones para atraer el consumo?