El día en el que el mercado de textiles impresos se hizo mayor

“Todo el mundo puede hacer pequeñas cosas y marcar la diferencia”. En el mundo de la moda, este es un mantra que no solo defiende la diseñadora y autora Stella McCartney, sino todo un sector que vive por y para la diferenciación y la vanguardia. Y en este sentido, la impresión digital está imprimiendo un valor diferencial.

El mercado de textiles impresos digitalmente está experimentando un crecimiento anual de dos dígitos, y se prevé que alcance los 5.500 millones de dólares (4.926 millones de euros, según el cambio actual) para 2023, según apunta Santi Morera, director de la división de Soluciones Gráficas en HP. No es para menos, pues la evolución de esta tecnología está provocando la optimización de la producción en éste y otros sectores que buscan personalización, y un notable ahorro de costes.

Consciente del ritmo ascendente de la impresión digital y de su impacto en la moda, la ropa deportiva, la decoración de interiores y las aplicaciones de cartelería flexible, durante la feria Fespa Global Print, celebrada este año en Múnich, fui testigo de la concienzuda investigación que los principales fabricantes están haciendo en este sentido y que se ve materializada en tecnologías como la nueva serie HP Stitch S. Es la única que ha incorporado un espectrofotómetro en línea, que garantiza la consistencia y la repetitibilidad del color; un sistema de cabezales térmicos, que aun siendo sensibles a la temperatura funcionan perfectamente con la sublimación, además de ser reemplazables por el usuario con un coste muy asequible; y el uso de tintas tanto en papel de sublimación como impresión directa en textiles base poliéster, incluso en tejido de bandera, lo que permite que sea visible en sus dos caras.

La propuesta de HP está diseñada para los profesionales que utilizan la impresión por sublimación y es capaz de imprimir directamente sobre papel con gramajes desde tan solo 25 gramos, cuando hasta ahora lo mínimo eran 45 gramos en otros sistemas de impresión, y además sobre textil (poliéster), por lo que considero que esta tecnología ofrece una indudable ventaja competitiva, tanto en términos de optimización de la producción como en ahorro de costes, ya que evita repetir impresiones y merma de material.

Durante Fespa Global Print 2019 también se presentó la Ri 1000, la nueva propuesta de Ricoh para impresión directa a algodón, que ofrece una solución rápida y flexible con una calidad de imagen notable. A diferencia de su antecesora, la Ri 3000, la Ri 1000 mejora considerablemente la resolución a 1.200 ppp y por tanto la calidad, utilizando el sistema de cabezales de su hermana pequeña la Ri 100 pero añadiéndole el blanco.

Con un mantenimiento más sencillo e intuitivo que la Ri 3000, la nueva tecnología de Ricoh permite imprimir sobre fibra natural: camisetas, bodies, bolsas de tela y sudaderas.

La moda no es el único sector que se verá revolucionado con las propuestas en impresión textil. La decoración y la publicidad también gracias a la tecnología UV, que permite imprimir directamente sobre objetos rígidos y cartelería exterior.

Durante la feria en Múnich también pudimos conocer las funcionalidades de la UV Ricoh Pro TF6250 para ampliar las soluciones UVI con las que Ricoh ya contaba, y está pensada para ayudar a los sectores de rotulación y artes gráficas a aprovechar las oportunidades que el mercado de la decoración industrial, el packaging, la serigrafía, etcétera, ofrecen.

El mercado de la impresión sobre textil ha cumplido la mayoría de edad, pero todavía tiene un amplio recorrido del que tanto fabricantes, a través de la investigación y el desarrollo, como usuarios podrán beneficiarse. Un camino en el que la sostenibilidad tendrá cada vez más peso. Un aspecto que marcará la tendencia de la impresión digital, que se dirige hacia soportes más ecológicos, especialmente libres de PVC.