El sistema Sintergrip es ideal para máquinas de 5 ejes permitiendo utilizar herramientas de poca longitud. / HERRAMIENTAS En un sentido general, el inserto con su forma especial de pirámide y el afilado de las puntas ayudan a penetrar el material a mecanizar y crea un acoplamiento con absoluta ausencia de juego, eliminando las fuerzas y vibraciones y convirtiéndose en un cuerpo único c deamarreylapiezaamecanizar. onlamordaza,elutillaje Los insertos de metal duro sinterizado SinterGrip existen en tres versiones, teniendo las mismas características técni- cas, pero diferenciándose por el tipo de afilado de las puntas y en el recubrimiento: • Inserto para acero con 12 puntas en forma de pirámide y con recubrimiento TiN • Inserto para titanio y acero tratado 50/54 HRC con 10 puntas en forma de piramiede y con recubrimiento TiAlCn; • Insertoparaaluminiocon6puntasconformadepirámide con 4 líneas de tope y con recubrimiento CRN/NbN. garras o utilizando directamente los insertos en el caso de utillajes especiales o platos autocentrantes. Para ello exis- Por lo tanto, desde el punto de vista técnico, se propone al ten diversas soluciones como, por ejemplo, las garras para mercado de una forma sin restricciones particulares para mordaza ‘All in One’, una solución funcional e innovadora el uso. Basta con amarrar la pieza con una fuerza mínima gracias a que dichas garras están ya mecanizadas con los de 2.000 kg para aluminio ó 3.000-4.000 kg para acero. Los alojamientos de los insertos, predispuestas para varios tipos insertos de metal duro, sometidos a esta fuerza, penetran de mordazas con los orificios de fijación a medida y además automáticamente en la pieza a amarrar creando una huella presentan un plus adicional: su recubrimiento en carburo de puntos de penetración. Debe destacarse que cada inserto de tungsteno para un mayor rozamiento durante el meca- para acero dispone de 12 puntas y, normalmente, en una nizado en segunda fase de la pieza. De hecho, el recubri- mordaza se utilizan 10 insertos (5 insertos por garra). Esto miento en carburo de tungsteno crea un efecto de amarre permite amarrar la pieza con 120 puntas que penetran la excepcional, evitando la penetración en la pieza que natu- pieza. Debido a ello, la mordaza o el utillaje de amarre se ralmente no está permitida en segunda operación. La versa- convierte en un cuerpo único con la pieza a mecanizar. tilidad del amarre es máxima dado que en primera Otra ventaja importante es que estos insertos se pueden operación se amarra con los insertos y en segunda opera- utilizar en cualquier mordaza o utillaje de amarre ya exis- ción, sin desmontar las garras, se amarra en la zona inferior tente en el mercado, simplemente montando una pareja de de alto rozamiento. / La gran estabilidad del amarre permite realizar grandes esfuerzos de corte. 85 /