Como es habitual en un mundo tan globalizado como en el que opera, Stantræk se enfrentaba a una fuerte competencia por parte de los países de Europa del Este al tener éstos unos salarios más bajos, pero también por las dificultades que tenía para ganar los proyectos que salían a concurso, dado que ampliar su plantilla de trabajadores para aumentar su capacidad de producción no era económicamente viable. Y todo ello dentro del marco de recesión económica global de los últimos años. La solución a este reto eran la automatización y la inversión en la robótica colaborativa en su planta, una solución asequible que les permitiría incrementar produc- ción y optimizar su capacidad operativa sin necesidad de contratar más personal. Stantræk optó por tanto por invertir en dos brazos robóticos UR5 de Universal Robots, los cua- les contribuyeron rápidamente a impulsar su productividad y a aumentar de forma considerable su facturación, con unos ingresos que pasaron de ser de algo más de 3 millones y medio de euros a más de 6 millones de euros en tan solo unos años, a la vez que sólo fue necesario ampliar la plantilla de 21 a 28 empleados. Todo ello fue posible gracias a la automatización de sus procesos de producción con ‘cobots’ de Universal Robots carac- terizados por su flexibilidad, fácil programación y rápido retorno de la inversión. Comparado con un operario experimentado que puede colocar en una caja una media de 400 piezas fabricadas por hora, el brazo robótico es capaz de colocar 300 piezas a la vez Uno de los robots UR5 instalados se utiliza para producir piezas mecánicas que primero las coloca en una máquina de estampación y luego en una caja. Comparado con un operario experimentado que puede colocar en una caja una media de 400 piezas fabricadas por hora, el brazo robótico es capaz de colocar 300 piezas a la vez, lo que supone un importante aumento en la producción de la compañía sin los costes asociados a un aumento en recur- sos humanos. Como es obvio un robot no tiene nómina, ni descansos, ni vacaciones pagadas, y gracias a ello Stantræk ha podido mejorar la rentabilidad de su negocio, blindar la empresa contra los efectos de la reciente recesión econó- mica, y mantener su competitividad frente a productores de otras partes del continente que pueden contar con mano de obra barata. Caso de éxito 33