Hoy ya es posible microinyectar con éxito materiales como aceros de diferentes tipos, cobre, titanio, aleaciones de níquel, alúmina o zirconia 18 / opción para fabricar una serie corta de validación, pero a la ejemplo el de los implantes y accesorios dentales. Las virtu- hora de fabricar en serie para comercializarlos, es necesa- des de la microinyección anteriormente mencionadas, rio optar por una tecnología adaptada a la producción de unidas a las propiedades intrínsecas de los materiales grandes lotes que garantice precisión y repetitividad, para metálicos o cerámicos hacen que estas tecnologías, aún en evitar desviaciones de una unidad a otra por desajustes del fase de maduración, tengan mucho camino por recorrer proceso. Por todo ello, la tecnología MIM sería la mejor antes de introducirse de lleno en el mercado. Con unas opción, ya que para grandes tiradas de piezas permitiría tasas de producción tan elevadas, una repetibilidad y robus- reducir el coste unitario (frente a la alternativa del mecani- tez incomparable y la posibilidad de trabajar con unas preci- zado), además de conseguir mejorar la precisión y la calidad siones, tolerancias y acabados superficiales óptimos en la del acabado. escala de la micra, los procesos convencionales de fabrica- En resumen, las tecnologías CIM y MIM abren las puertas a ción para todos estos elementos son incapaces de ofrecer un sinfín de posibilidades y nuevos mercados, como por soluciones con igual valor añadido. / Reportaje