ENTREVISTA Área de fábricas de Cerviglas. 62 Somos capaces de realizar aproximadamente el 95 % de todos los procesos de transformación y manipulación del vidrio plano y curvo: • Fabricación de doble acristalamiento SGGCLIMALIT. • Corte automático de monolítico y laminado. • Transformación del vidrio con línea avanzada de maquinaria de control numérico, rectilíneas y bilaterales. • Hornos para curvado. • Hornos de fusing. • Hornos de templado para todo tipo de vidrios. • Hornos de Heat Soak Test. • Línea de fabricación de vidrio laminado con PVB o EVA con autoclave. • Línea de serigrafía con pintura cerámica y orgánica. • Línea de impresión digital con tinta UVA sobre vidrio o vinilo. Las últimas incorporaciones son una nueva mesa de corte laminar de grandes dimensiones, más líneas de control numérico con lava- doras y un tercer horno de curvado con un control que automatiza el funcionamiento de los tres hornos las 24 horas del día, los 365 días del año. Una de las líneas de trabajo de Cerviglas es la del vidrio laminado. ¿Qué procesos debe seguir este tipo de transformado y con qué me- dios cuenta Cerviglas para llevarlo a cabo? Los vidrios laminados se componen de dos o más vidrios unidos entre sí por una lámina de material plástico (PVB o EVA), la adherencia entre los vidrios y dicha lámina se obtiene mediante un proceso tér- mico y de presión o vacío según los casos. Para el laminado con PVB (butiral de polivinilo), los vidrios se cortan a la medida y sin necesidad de cantearlos se coloca el primer vidrio en la línea de laminado, en una sala blanca. Es una sala especialmente diseñada para obtener bajos niveles de contaminación con parámetros ambientales estric- tamente controlados: partículas en aire, temperatura, humedad, ujo de aire, presión interior del aire, iluminación. En esta sala se lava el vidrio, se escuadra y sobre él se colocan las láminas de PVB necesarias, entra el segundo vidrio en la línea, se lava, se escuadra y se coloca sobre el primer vidrio y la/las laminas; se recorta el PVB sobrante y el conjunto pasa por un horno y unos rodillos, lo que se denomina calandra, sale de la línea de laminado y se coloca en unos carros para introducirlo en el autoclave. Dentro del autoclave es sometido a un ciclo de presión y temperatura con el que naliza el proceso de laminado y el vidrio queda listo para procesos posterio- res. Con este sistema se pueden laminar la mayoría de los vidrios ( oat, parsol, vidrios con capa, templados, lacados, con serigrafía, etc.), excepto vidrios con inserciones ya que en la mayoría de los casos estos materiales no soportan la temperatura a la que son sometidos los vidrios durante este proceso, que es de unos 180 oC. Para el laminado con EVA (etileno vinil acetato), los vidrios a laminar se cortan y se cantean (o al menos se le hacen aristas); se coloca el primer vidrio y sobre él las láminas EVA necesarias y las inserciones (tela, madera, bra, etc.). Sobre ellos se coloca el segundo vidrio, se recorta la lámina sobrante y se encinta perimetralmente todo el conjunto con una cinta especial. El paquete formado por los vidrios y las láminas e inserciones se coloca en las bandejas del horno de laminar entre dos mantas de silicona a las que se les hace el vacío; se introducen dentro del horno donde se someten a un ciclo de tiempo y temperatura determinados -de entre 80 y 130 oC- dependiendo del espesor de los vidrios y las láminas empleadas. Finalmente se retira la cinta perimetral y se limpian los restos de la lamina EVA. En Cerviglas contamos con líneas de laminado tanto de PVB como EVA así como el autoclave con dimensiones máximas de 5.100x2.600mm. Sala blanca PVB de Cerviglas. 62<<