VN28 - Técnicas, equipos y productos para la enología y la viticultura

VITICULTURA 78 de pulgares para evitar la reiteración de heridas inconvenientes. • Madera de protección: respetar siempre un trozo de madera para evitar un exceso en la profundidad del cono de desecación, aunque esto suponga el rebaje extraordinario de dicho trozo de madera seca en la poda de la campaña siguiente (Foto 3). Teniendo en cuenta dichos objetivos básicos, los criterios de poda deben responder a las siguientes consideraciones (Yuste 2021): • Ejecución correcta del corte sobre el sarmiento: enmitad del entrenudo o justo en el nudo siguiente (sin dejar yemas en éste) dependiendo de la longitud del entrenudo, evitando acercar el corte a la última yema dejada (al menos 2 cm de tocón). Inclinar el corte levemente hacia el lado opuesto a la yema más alta respetada cuando la disposición espacial del sarmiento lo requiera (para evitar perjuicios por el lloro y la lluvia en dicha yema), tratando de lograr la menor sección posible de corte para reducir el tamaño de la herida (Fotos 4 y 5). • Ejecución correcta del corte sobre el pulgar antiguo: no acercar el corte a la base del pulgar, tratando de lograr la menor sección posible de herida, puesto que la profundidad del 'cono de desecación' (madera necrosada) que se producirá es al menos tan grande como el diámetro del corte de poda (Fotos 6 y 7), dejando la eliminación del correspondiente trozo de madera, que se desecará, para la campaña siguiente. • Eliminación correcta de chupones y elementos de madera vieja: no apurar el corte hacia el brazo o el tronco, para evitar la profundización de la necrosis hacia el interior de la madera, causada, como ya se ha indicado, al formarse el cono de desecación (Figuras 1 y 2 y Foto 8). • Respeto de la vascularización en brazos y base de los pulgares: evitar los cortes alternativos a cada lado del brazo o base del pulgar, procurando mantener una 'corriente de secos' y una 'corriente de verdes' (franja lineal, a lo largo del brazo que no está interrumpida por cortes de poda, normalmente curvada), para evitar la desecación de pulgares y brazos (Foto 9). 5. TIPO DE PODA Y SISTEMA DE CONDUCCIÓN El tipo de poda, acorde con cada sistema de conducción, condiciona el potencial de infección por hongos de la madera. Dicho potencial de infecFoto 6. Cono de desecación en pulgar viejo. Foto 7. Cono de desecación y entrenudo inferior verde. Figura 1. Corte de chupón en tronco (Martínez-Zaporta e Hidalgo 1955). Figura 2. Daño por corte de chupón en tronco (Battista y Tomasi 2017). Foto 8. Rebaje excesivo de pulgar viejo y de pulgar nuevo.

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